¨Aprendí que el amor te consume por completo, que hasta podría llegar a matarte¨
Hay personas que nacen con dolor y hay otras que van hacia él, Alyssa sufrió mucho y sin ella pensarlo tenía traumas, creía que era normal hasta que su padre murió. Est...
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ALYSSA
—¡Quiero a todos, quiero que todos los busquen!
El salón estaba repleto de gente, no tenía seguro de cuánto tiempo llevaba sin dormir, pero no era importante. No ahora.
Pasaron 42 horas desde que desaparecieron, no dejaron huellas, rastros o señales. Ningún indicio de donde pueden estar.
Subí corriendo las gradas, no sabía exactamente a dónde me dirigía, pero mis piernas parecían saber el camino correcto y exacto.
Justamente me detuve frente a la puerta del cuarto de Asher, él no dormía aquí hace mucho tiempo, aunque sus cosas permanecieron ahí adentro.
Levanté mi mano, quería saber que había y a la vez no, me tomé mi tiempo decidiendo si tenía que ver o no, no habría vuelta atrás abrí de golpe la puerta, el interior estaba totalmente oscuro, me adentre y cerré detrás mío. Era una habitación cualquiera, excepto por la ropa tirada, la cama desordenada, la oscuridad completa y sobre todo su olor.
Me dirigí al centro y me senté al borde de la cama, respiré profundo, normalmente nunca pude llegar a necesitar a alguien, hasta que él llegó. Si pudiera recordarlo, sabría que era lo que él exactamente pensaba. Podría conocerlo más, ni siquiera hablamos de nosotros, no era necesario, no hasta ahora.
Me paré de nuevo para recoger toda la ropa, la ordené y doble, al abrir su armario me quería topar repleto de sus cosas, era lo contrario, lo máximo que encontré fueron tres pantalones, cinco camisetas y una toalla.
No había nada más.
Eso fue lo que más me llamó la atención.
Dejé el armario abierto para revolver todas las cosas del lugar, buscaba y tiraba las cosas de las cajas, me tomé un tiempo haciendo eso, después de un rato lo único que me quedaba era su mesa de noche.
Repetí lo mismo pero tampoco había nada, me rendí, volví a la cama y me tiré en esta, mi vista fue directamente al techo. Estuve un largo rato mirando fijamente una parte en específico, la cerámica estaba chueca. Me subí a la cama y estiré mi brazo para mover a un lado ese cuadrado, era un pequeño lugar escondido.
Moví mi mano adentro del huevo, empecé a buscar a su alrededor cuando algo se movió. Agarré el metal frío que había tocado, al sacarlo note que era un arma, lo mire con atención, en un lado estaba la calavera. Era la pistola de Asher, quería dejarlo de lado, tirarlo al igual que el resto de las cosas, pero sentía que tenía que verlo mejor. Di la vuelta sujetando el mango cuando noté otra marca sobre el liso color.
ALYSSA DONOVAN
Mi nombre estaba ahí, el estómago se me revolvió. Tenía que saber donde estaban, tenía que hacerlo.
Rastrear, corrí hacia la ventana para ver el estacionamiento, solo estaban dos coches, el auto de Asher no se encontraba, se lo llevaron.
Guardé su pistola en una de mis botas y corrí escaleras abajo, busqué un par de llaves en mi bolsillo. Crucé los pasillos y bajé las otras gradas.
