Cᥲrtᥲs ᥲ ᥙᥒ ᥲmᥲᥒtᥱ ρᥱrdιdo // Kᥙrokᥱᥒ - Omᥱgᥲvᥱrsᥱ

Capítulo 17

La historia había sido terminada y con gran orgullo de ella. Kuroo se le pasaron los tres días volando, y sin poder irse del apartamento de Kenma porque el omega no se lo permitía. Su celo se basó en muchos mimos, hambre y sexo. Sorprendentemente Kenma era muy osado en ese sentido pero el alfa no le molestaba en absoluto, le gustaba que se sintiera cómodo con él.

El celo de Kenma había concluido, y ese día Kuroo se mudaba para donde su primo, además que habiendo vuelto a la universidad debían ponerse al día y no perder más tiempo, los exámenes estaban cerca y ninguno le había prestado mucha atención.

Además de que ese día entregarían su por fin terminado trabajo. Las cosas iban avanzando a un ritmo tranquilo. Kenma en la noche iría a trabajar un par de horas donde Tobio junto con Akaashi quien no habían visto de hace una semana.

Ambos caminaban por los pasillos de Universidad con normalidad, algunas miradas les caían por encima, hablando de que hacia un alfa tan guapo como Kuroo al lado de un omega sin olor.

Si solo supieran... Pensaba Kenma al notar aquellas miradas sobre su hombro.

El timbre sonó por todo el lugar y los chicos caminaron hasta su aula, que era obviamente la de literatura.

—Kuroo, no quiero presentar el trabajo. — Le comentó Kenma antes de entrar al salón. Kuroo frunció el ceño.

—¿Por qué? ¿No te gustó como quedó? — El omega negó varias veces. —No quiero estar enfrente a todos ellos. — Le esclareció y Kuroo asintió dándole un pequeña sonrisa.

—No te preocupes omega, yo pasaré al frente si eso quieres, no me importa.

—¿De verdad?

El alfa asintió para luego entrar a la clase.

Ambos se sentaron en sus respectivos lugares, uno al lado del otro, Kenma sacó sus cosas como siempre y Kuroo dejó a fuera su trabajo. Las miradas no faltaban pero dejaron de prestarles atención cuando llegó el profesor. Quien con su impecable sonrisa empezó a pedir que dieran un resumen de sus historias.

Y así pasó la clase, cada par elegía quien diría el resumen y explicaría su historia, que para vista de Kuroo habían historias geniales, como de misterio, criminal, romance e incluso fantasía. Mucha variedad sinceramente.

—Ok, Kuroo y Kenma, es su turno.— Habló el profesor mientras tachaba algo en su libreta.

Kenma miró a Kuroo quien le guiñó un ojo y se levantó del lugar. Entregando su trabajo encuadernado al profesor se colocó enfrente a los demás y comenzó a explicar.

—Primeramente, buenos días chicos. Y bueno, como sabrán mi trabajo fue hecho con mi compañero Kenma, ambos aportamos mucho en la historia y creemos que nos salió realmente bien.— Tomando un pequeño descanso de algunos segundos, prosiguió.

—La historia es un romance juvenil de reyes y reinas. Solo que aquí el romance es de dos chicos, quienes por una casualidad se conocieron y con el pasar del tiempo terminaron gustándose. Lo sorprendente de la historia no es lo cliché que suena sino todo su desarrollo en sí. Considero que el crecimiento de personajes fue hermoso y el final doloroso pero lindo.

—¿Cuál es el final?— Preguntó una chica al fondo del salón.

—En la historia, uno de ellos muere y el otro queda solo por muchos años hasta él también morir. Pero con la promesa de que algún día se reunirían. Algunos años después de forma anónima se reencuentran, y aunque ellos no lo sepan sus almas ya estaban destinadas a estar juntas, porque se habían extrañado más que nada.

Un exclamado aplauso resonó por el salón seguido de otro y otro más. Todos aplaudieron al pequeño resumen del alfa, éste de inmediato busco la mirada de Kenma quien en su pequeño puesto le mostró su pulgar arriba, en demostración de que hizo un buen trabajo.