Choice Game ((🔞 Tokyo Revengers Kazutora x TN x Chifuyu x Baji 🔞 ))

Fast Fortune

Tu ex prometido se quedó en shock por esa escena que estaba a casi nada de convertirse en algo no apto para todo público.

—Creo que el B7 se salió un poquito de control— Yuzuha miraba con los ojos bien abiertos y las cejas alzadas, sacó su teléfono para tomar un par de fotografías, su corazón era de Takemichi, pero era humana y no estaba ciega como para no admirar los hombres que tenía enfrente.

—No te preocupes, no serían los primeros que cogen en el bar— Emma observaba atenta pues todavía no comprendía del todo como esos tres terminaron con la misma chica y que esa chica fuera su mejor amiga de la infancia lo hacía mucho más raro.

—Cuando fue tu B7— Senju se abalanzo a la barra para tomar algunas copas y una botella —Hina-chan y tú por poco violan a Hanagaki en la escuela— se burló de Yuzuha mirándola acusadoramente, no podía olvidar que su amiga se enamoró de Takemichi cuando este ya salía con Hina y que planearon un B7 para ver si el rubio sentía algo por ella. Al final resultó que Takemichi sí sentía algo y que Hina se encontraba dispuesta a compartir (convirtiendo a Takemichi en uno de bastardos más afortunados del planeta).

—E-eso fue...— trató de explicarse pero mejor guardó silencio.

—Mi B7 también me llevo a tener sexo— Emma sonrió recordando que Chifuyu le ayudó mostrando mucho interés y fingiendo que se le declararía, fue un plan perfecto que trabajaron durante semanas. Recordaba el rostro de Draken al llevársela a rastras para entre besos y caricias demandantes decirle que ella era suya para después terminar haciéndolo en la parte de arriba del local de motocicletas.

—Yo no tuve B7... ustedes organizaron un B7 para engañarme— Senju arrugo las cejas tomando otra copa.

—Senju-chan, esa es tu culpa, Wakasa-san siempre estuvo enamorado de ti pero tú no te decidías entre él y el chico raro con el que salías.

—Los B7 son muy peligrosos— Hina tenía la boca abierta pues eso que hacían los cuatro seguía subiendo y subiendo de tono. Quería apartar la mirada pero joder que admitía que Dios se había tomado todo su tiempo e inspiración para hacer a esos tres.

—Échales agua... Emma-chan, ya me calentaron y yo aquí sola— Senju se recargó en la mesa, de nuevo estaba odiando a su novio por abandonarla esa noche.

—Déjalos, déjalos, es mi local. ¡Que se diviertan!

Las cuatro emitieron un chillido acomodándose en sus asientos al ver que todos los de la mesa de tu ex prometido se retiraban pues tal parecía la acompañante de pechos no tan grandes se encontró al borde de un colapso.

La respiración se les corto al ver a tu ex prometido caminar hasta ti con una mueca llena de algo parecido a los celos enfermos.

—Seguro que la lía, dice algo pendejo y Baji-san le parte la cara— Senju colocó un billete sobre la mesa.