White Mask©

Capítulo 36

   me encontraba perdida  y todo por tu maldita culpa.

— no voy a permitir que te lleven así tenga que pagar mi traición,con mi vida—

Esas palabras me habían dejado atónita, y confundida. Me quedé estática en mi sitio observando la mirada preocupada y nerviosa del rubio. Esperando ansiosa que dijera algo con respecto a lo que acababa de decir, pero parecía como si el gato le hubiera comido la lengua. No sabía cómo preguntarle, no sabía cómo indagar por lo que acababa de decir, pero estaba aturdida por el sonido incesante de las alarmas que no se detenían por nada.

Solo ví cuando la manzanita de Harold bajo, indicando que trago en seco, y sus ojos verdes se dirigieron a mi boca,observando la con un brillo intenso en su mirada peculiar. No sabía porque pero eso encendió Algo en mi, algo que no sería capaz de expresar con cualquier palabra. Solo se que sus labios rosados se posaron en los míos, creando una sensación de hormigueo en mi vientre.

En ese momento me deje llevar ante las distintas emociones que revoloteaban todo mi interior. Ignore las alarmas, ignore lo que esto conllevaba, ignore lo que me acababa de decir, incluso de mi mente se borró lo que en un momento había sentido con Adam.

Solo era una presión de labios pero poco a poco sus labios comenzaron a moverse entre los míos suavemente, con delicadeza, se pegó más a mi, llevando una mano a mi barbilla para profundizar el beso y la otra a mi cintura pegandome más a su cuerpo.

Nunca creí verme en esta situación con Harold, sobre todo porque solo lo veía como un buen amigo, al parecer todo comienza con una simple amistad.

No sabía porque pero me daba la sensación de que esto era un despedida.

Instituvamente cerré mis ojos, disfrutando el momento. He de admitir que este chico era increíblemente bello, ¿Para que negarlo?, Tal vez desde un principio sabía que iba a caer en sus encantos, el siempre había Sido atento conmigo, me había demostrado que era un gran chico apesar de que estaba metido en este caótico lío.

Entendí todo, el me dió muchas señales de que yo le gustaba en todas las veces que nos habíamos visto, pero fui muy ciega, seguía sometida en mi dolor que nunca me fijé en mi entorno.

El beso duro unos segundos, segundos que obviamente disfrute, y lo hubiera seguido disfrutando si no hubiera Sido por la  falta de aire.

Quería a este chico, realmente que lo quería, pero temía que mis traumas lo alejaran de mi, o el simple hecho de que le tape algo muy importante, lo que había pasado con mis padres y el porque estaba involucrada en esta pandilla. Siempre que trataba de sacar a relucir el tema me callaba la boca porque no sabía si se iba a burlar o algo por el estilo, era muy insegura que eso me hacía ver muy patética.

Este me miro con unas cuantas lagrimas en los ojos que no sabía en qué momento las había soltado, me imagino que fue durante el beso. Pegó su frente a la mía sin dejar de sonreír.

Me sentía feliz en el fondo, pero también temía reflejar esa pequeña alegría que había en mi interior.

De un momento a otro las alarmas cesaron, y fue allí donde pude encontrar mi voz para hablar.

— yo..—

— te amo Lany— dijo con su mirada penetrante— te amo como nunca he amado a alguien.