Luna

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Llega el día del nombramiento de Lee, Leander invito a los líderes de la manada incluyendo a mi padre y la familia de Lee, me miro en el espejo dudando de mi elección de vestido.

— Te vez hermosa, apuesto que tu mate babeara por ti— me dice mi nana desde la puerta.

— No quiero impresionarlo, solo no me siento cómoda con este vestido— ella se ríe.

— No es eso, estas nerviosa por que sabes que vas a verlo, por que el vestido se te ve hermoso, enseña mucha piel para mi gusto, pero tu mi niña tienes un cuerpo hermoso— a veces me da miedo lo mucho que me conoce mi nana pero ella es quien me ha visto crecer así que es mas que obvio.

— No se por que estoy nerviosa, hace solo unas horas me era indiferente— ella se acerco y me agarro de los hombros.

— Hace unas horas estabas más ocupada ayudando a tus amigos a organizar todo para su propio nombramiento— suspire, mi celular empezó a sonar, mi nana me dejo sola para que pudiera responder, en la pantalla aparecía el nombre de Lee.

— Buenas tardes futura Luna Zaylee—

Vamos Roxie tu no tienes por que llamarme así— nos reímos.

— ¿Como estas?— podía notar el nerviosismo en su voz.

Nerviosa, temo equivocarme y que Leander me rechace—

Todo saldrá bien Lee no tienes por que estar nerviosa—

¿Podrías venir? Por favor te necesito— suspire.

— Solo por ti— ella soltó un chillido de emoción.

Les dire a los guerreros que te dejen pasar— colgamos al mismo tiempo, tome lo que iba a necesitar para terminar de arreglarme y lo eche en un bolso pequeño del mismo color del vestido, me puse un abrigo blanco que me llegaba a las rodillas.

Salí de mi habitación, baje las escaleras, mi papá y mi nana seguramente se estaría arreglando pues todavía faltaba una hora para que fuera el gran evento, le mande un mensaje a mi papá de que me adelantaría y salí de la casa, tuve que caminar, la nieve me dificultaba avanzar rápidamente así que me transforme tome el bolso con mi hocico y corrí al límite de la manada.

Una vez ahí me transforme en humana, acomode mi abrigo y mi vestido, los guerreros de la manada New Moon me escoltaron a la casa del Alfa, pude sentir sus miradas en mis piernas en todo el camino.

— Si no quieren perder la cabeza dejarán de ver de esa manera a mi mate— hablo una voz masculina detrás de nosotros, al girarme vi a Warren —Yo la acompañaré desde aquí— les gruño a los guerreros y ellos bajaron la cabeza.

— N...no era nuestra intención Beta Warren— él no dijo nada me tomo de los hombros y me obligó a caminar.

— Como es que puedes ponerte algo tan corto— al llegar a su casa me quite el abrigo y él abrió los ojos sorprendido —No vas a quitarte el abrigo en toda la noche, me oyes— levántate una ceja, iba a responderle pero entonces su nana apareció.

— No entiendo por que no la has rechazado, es obvio que tiene tan poco amor propio que necesita las miradas de todos sobre su forma de vestir tan vulgar— gruñí.

— Es por que tengo tanto amor propio que me gusta como se me ve este tipo de ropa, yo puedo vestirme como yo quiera y no es que quiera las miradas de todos sobre mi, no necesito eso—

— Pues parece que quieres robarle el protagonismo a la futura Luna y tu amiga— me estaba empezando a molestar.

— Lee sabe que me gusta vestirme así y no quiero robarle el protagonismo, por que ella tiene una manera diferente de hacerse notar, tiene una belleza diferente a la mía, si me disculpan voy a ir a ver a mi amiga— subí las escaleras y fui a la habitación donde estaba Lee guiándome por su olor, toque la puerta antes de entrar.

Mates opuestos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora