Min YoonGi un apuesto hombre de veintiséis años, dueño de una editorial de libros, mujeriego y para nada creyente en el amor.
Kim TaeHyung un precioso chico escritor recién graduado y con un hermoso hijo de cinco años, quien es su mayor motivación.
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TaeHyung abrió sus ojos lentamente, sus párpados se sentían pesados pese haber dormido como un bebé. La habitación era alumbrada por algunos rayos de sol que se colaban entre las cortinas.
Escucho como la puerta de la habitación era tocada suavemente y se levantó por completo.
— ¿TaeHyung?— era Hyuna.
— Estoy despierto - anunció - puedes pasar.
La chica abrió la puerta, en cuanto entró ala habitación le sonrió a TaeHyung.
— Hola - saludo - Solo venía a avisar que el almuerzo está listo.
— ¿Almuerzo?, ¿Que hora es? - ¿Pues cuánto había dormido?, TaeHyung reviso rápidamente la hora en su celular, 2:17 p.m, marcaba el teléfono.- ¡Cuánto lo siento!, Es muy tarde.
— No te preocupes, YoonGi dijo que te dejara dormir. Te espero abajo, mis padres llegaron... - TaeHyung le miró con un poco de miedo mezclado con nerviosismo. - Tranquilo no son malos, bueno mi madre es muy dulce, y mi padre bueno el... No le tomes en cuenta - Hyuna le regaló una sonrisa, para así salir de su habitación.
TaeHyung no quería salir de la habitación, conocer a los padres de YoonGi por alguna extraña razón lo hacían sentir nervioso. "¡Vamos TaeHyung, no seas cobarde!", Se dijo así mismo, con eso TaeHyung se dirigió al baño para poder tomar una ducha.
Una vez ya listo, salió de la habitación. Dio un respiro y a pasos lentos se dirigió al comedor. Al llegar notó la presencia de Hyuna, YoonGi, un señor con semblante serio y también una hermosa mujer pelinegra. Definitivamente Hyuna y YoonGi habían sacado la belleza de su madre.
— Buenas tardes - saludó educadamente.
— Buenas tardes - saludó la mujer con una hermosa sonrisa dejando ver sus lindos dientes aperlados, misma sonrisa que portaba YoonGi.
— TaeHyung, toma asiento - le dijo Hyuna, de inmediato se sentó a un lado de ella, algo intimidado por la mirada del padre de YoonGi.
— ¿Quién es él? - pregunto el padre de YoonGi con un tono frío e indiferente.
— Mi asistente - le respondió con el mismo tono. El ambiente entre los dos hombres Min se sentía pesado, todos procedieron a comer en silencio.
— En cuánto termines, quiero verte en mi estudio - Dijo el hombre mayor a YoonGi, sin esperar una respuesta se levantó de la mesa y se fue.
— Así que eres el asistente de mi hijo - la señora le hablo intentando aligerar el ambiente.
— Sí, soy su asistente. Kim TaeHyung para servirle, señora Min...
— Oh, cielo, puedes decirme MinSeo.
— Esta bien, MinSeo - TaeHyung sonrió.
De nuevo todo se quedó en silencio, pero esta ves era un silencio cómodo que se formó hasta que Hyuna habló.
