Lado A (4)

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 Alguien llama a la puerta de Oda. Son los policías de la estación cercana que vinieron a preguntarle algunas cosas porque alguien reportó un hombre ensangrentado colapsando cerca. Dazai le hace señas a Oda para que se mantenga en silencio.

 Oda comienza a pensar sobre qué debería hacer.

 Si abre la puerta y le dice a los policías que no sabe nada, ellos se irían y eso es todo. Pero tiene otra preocupación.

 Si Dazai cometió un crimen (Que ciertamente lo hizo), luego seré acusado de albergar a un criminal. Dependiendo de lo que ocurra, incluso quizás seré tachado como cómplice. Si eso sucede, disfrutaré el resto de mi vida en un alojamiento estatal con tres comidas al día.

 La segunda opción es decirle a los policías sobre Dazai. En ese caso, Dazai definitivamente será arrestado (porque todo sobre él es sospechoso) y Oda también estará en riesgo de ser sospechado como cómplice. Oda mira a Dazai, quien está "sonriendo una sonrisa que es cincuenta veces más oscura y densa que la de un niño pensando sobre qué bromas hacer". Viendo esa cara, a Oda le nace otro miedo que es que si vende a Dazai a los policías ahora, se enfrentará a la venganza de la mafia luego.

 Conclusión. Pretender no tener nada que ver es la única forma.

 Se esconden detrás de la cama y esperan a que los policías se vayan. De repente, Dazai toca el hombro de Oda, recordándole de la pava de agua que está hirviendo su café, la cual va a silvar una vez que haya acabado. Están alrededor de ocho metros de la cocina. Si Oda sólo camina ahí, el suelo rechinará y los policías sabrán que hay alguien en la habitación.

 Miro a Dazai otra vez. Luego de un momento de duda, empieza a hacer una serie de gestos. Señala a la cocina, luego a mi. Sostiene su palma frente a él, y entonces levanta su otra mano sobre esta, sus dedos hacia abajo. Lleva todos los dedos de esa mano hacia atrás, dejando sólo su índice y el dedo medio en el aire, y luego mueve dos dedos hacia adelante, uno detrás de otro. Luego pone su índice en su labio. Y entonces me da unos pulgares arriba y sonríe, y asiente.

 Asiento en respuesta.

—¿Qué significa? —pregunto.

—¡Lo sabía! —Dazai susurra en una suave voz—. ¿No entendiste? ¡Dije que vayas en puntas de pies a la cocina y apagues el fuego! No puedo caminar bien en estas condiciones.

—Vamos a hacerlo —asiento—. No hay mucho tiempo hasta que el agua hierva. Ambos necesitamos apurarnos.

—Hey, ¿Realmente estás apurado? —Dazai me da una expresión confundida—. No puedo saberlo porque tu cara no cambia en nada...

Oda comienza a dirigirse a la cocina. Usa su habilidad para saber dónde debería o no colocar sus pies para no hacer sonido. Pero entonces ve el futuro donde la pava comienza a silvar y se pone tan nervioso, que decide que necesita un nuevo tipo de poder, así que comienza a gatear en cuatro patas hacia la cocina.

 Detrás de mi, Dazai estalla en una pequeña risa como si no pudiera soportar más mis movimientos. Dazai tiene razón. Si alguien fuera capaz de fotografiar lo que estoy haciendo y ponerlo en un periódico, me mudaría a otra ciudad el mismo día.

 Oda finalmente logra llegar a la pava. Sólo necesita alcanzar la perilla del gas de la cocina y apagarla. Debería tener suficiente tiempo.

The Day I Picked Up Dazai  [Novela ligera - Bungou Stray Dogs]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora