Qᴜɪᴢáꜱ ʜᴏʏ - ʟᴜᴋᴀ ᴄᴏᴜꜰꜰᴀɪɴᴇ

«Capítulo 6»

No quería molestarla, o al menos no intencionalmente.

El recuerdo de su rostro fruncido por el enojo y la incomoda, una sensación de ira llegó otra vez a mi mente recordando toda la conversación.

E inevitablemente mi dedo se desplazo por la guitarra hasta tocar una cuerda totalmente difetente a la melodía.

Suspiré con pesadez, no era la primera vez en el día que mi mente divaga haciendo que me perdiera por completo de toda la canción.

- Luka ¿Estas bien?

Sonreí asintiendo, Marinette siempre se mostraba preocupada por mi, sabía lo que pasaba por su mente, sus expresiones faciales eran bastante divertidas, Marinette era una melodía fácil de escuchar.

Completamente diferente a ella...

- Luka - volvió a llamar viendo que quedaba hundido en mis pensamientos - ¿Estas bien?

- Estoy bien Marinette - respondí sonriendo mientras acariciaba con ternura su cabello, ambos estabamos en el borde del río, escuchando como componía una nueva melodía.

- Es más difícil de lo que pensaba - agregó mirando mi guitarra.

- Usualmente no lo es - murmuré jugando un momentos con las cuerdas - Al menos no para mi.

- ¿Entonces?

Negué sonriendo, no era un tema que quisiera tocar con ella, prefería no meterla en mis problema, suficiente tenía con sus secretos.

- (T/N) posó en una revista junto a Adrian - informó mirando la tranquila agua que se encontraban bajo nuestros pies.

- ¿Si?

Asintió sin notar mi mirada, no se veía bien, podía sentir su tristeza, decepción y angustia, no quería esto, quería ver a Marinette feliz y, aunque fuera por otro chico, yo sería el soporte de Marinette.

Dejé con cuidado la guitarra tras nosotros y con calma, me acerqué a ella lo suficiente para apoyar su cabeza en mi pecho.

Suspiró al instante que sintió las leves palmaditas en su cabeza.

- ¿Crees que ella sienta algo por Adrien? (T/N) es hermosa, divertida y famosa.

- Creo que son simples amigos.

- Pero, no quita el echo de que pueden ser algo más.

Lo pensé, mi mente me obligo a pensar en ellos dos juntos, (T/N) siendo alguien alegre, aunque encerrada en su propia burbuja y la mayoría de las veces absorta en sus propios pensamientos.

Y Adrien, llevando una carga sobre sus hombros que nadie conoce, parecía alguien obligándose a encagar.

- ¿Algo paso en el Zoológico, Luka? No quieres decirme pero desde ayer que actuas raro.

Apreté mis labios haciendo una fina linea con ellos.

- ¿Marinette que hora es?

Extrañada, ella abandonó mi pecho para verme con curiosidad, aunque al instante abrió sus ojos asustada mientras se levantaba de la orilla.

- ¡Llego tarde!

Reí copiando su acción, tomé la guitarra y la dejé con cuidado en el canasto de la bicicleta.

- En ese caso tendremos que usar el transporte más rápido de todo París - indiqué tirándole el casco sobrante.

Realmente me alegró ver una linda sonrisa en sus labios junto a una leve sonrojo, sin perder tiempo se puso el casco para subirse a la bicicleta, tiempo después ibamos camino a la preparatoria.