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El octavo mes había pasado rápido, ahora el rubio contaba con 9 meses, por seguridad de él y su bebé, solo salía al baño e iba a la cocina, algunas veces iba al balcón a sentarse para tomar aire, Sunoo era el que salía a comprar cosas y estaba atento al mayor, lo ayudaba si lo necesitaba y lo acompañaba al balcón.

Como Sunoo había ido de compras con Jake, Sunghoon quedó a cargo de Ni-ki.

- el rubio se paró hacia el baño - Ve con cuidado - dijo Park, al terminar Ni-ki salió del baño y se sentó en el sofá suspirando exhausto - Estás bien? - se sentó a un lado del rubio.

- Si, solamente que es más cansado pararme y hacer mis cosas, no recuerdo en qué momento creció tan rápido.

- Tu sufrimiento pronto acabará.

- Falta una semana para la cesárea, y eso me pone nervioso, y tengo mucho miedo.

- el pelinegro lo observó preocupado - Qué te da miedo? - se volteo a un lado para poder hablar mejor.

- Cómo mi cuerpo no es el más adecuado para un bebé, el parto puede ser un problema, algo puede llegar a complicarse y Sunoo tendrá que elegir a quién salvar, no quiero dejarlo solo con una gran responsabilidad, y tampoco quiero dejar sin padre a nuestro bebé, me angustia pensar en todo eso - el rubio comenzó a soltar unas cuantas lágrimas, haciendo que el mayor se preocupara más, acercándose al rubio para abrazarlo.

- Mi niño - susurró a su oído - Yo se cuanto amas a Sunoo y a tu hijo, todo saldrá bien, EungYeon crecerá con sus dos padres y serán muy felices los tres - sonrió.

- Gracias por estar aquí, pero si aprecias tu vida, no me recuerdes las veces que lloré en frente de ti, sabes perfectamente que serás hombre muerto si lo haces.

- el mayor solo rió ante el repentino cambio de humor del rubio - Si si si, ya se.

- Tengo hambre, iré a la cocina - el rubio se paró y fue hacia la cocina, tomó un bote de fruta picada y comenzó a comerla, luego de unos minutos, se dispuso a ir al sillón, pero cuando se dio la vuelta para hacerlo, sintió un dolor en su bajo vientre, al ver que desapareció volvió a caminar y luego paró al sentir otro más fuerte que el primero haciendolo gritar.

- Ni-ki, que te pasa?

- Creo que el bebé ya viene - después de decirlo, sintió algo mojado en su pantalón, el mayor lo miró impactado e inmediato fue con el para ayudarlo.

- Ni-ki, esto no es ni cerca de parecido al agua, esto es sangre - el rubio lo miró asustado - Te tengo que llevar de inmediato al hospital - tomó sus llaves, la maleta y marcó al teléfono de su doctor, este les dijo que prepararía todo y luego al subir al auto, llamó a Jake.

- Hola amor, que pasa?

- Estoy llendo al hospital, Ni-ki al parecer tiene un problema y comenzó a sangrar.

- Qué?! Y está bien?!

- Esta teniendo dolores en su vientre y no para de sangrar, solo lleva a Sunoo al hospital - el rubio lo interrumpió.

- Que no le diga lo de la sangre, a estado muy estresado con el trabajo y con el embarazo, no le digan sobre la sangre.

- Cómo te decía, solo llevalo al hospital y no le digas sobre la sangre.

- Por qué no? Esto es grave, debe saberlo.

- Cielo, Ni-ki me dijo que no le dijeras, Sunoo se a estresado mucho, así que respeta su decisión.

- Está bien, pero cuidalo mucho - colgó la llamada.

- Falta poco Ni-ki, aguanta.

- Park tengo miedo, no paro de sangrar y me duele como el infierno.

𝐄𝐧𝐭𝐫𝐞 𝐥𝐚𝐬 𝐬𝐨𝐦𝐛𝐫𝐚𝐬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora