Salvame [Shigadeku]

Nada 13

Hoy es martes.

Mi primer día en la escuela de la U.A, bueno en si es mi primer día en la clase 1A. No quiero ir.

Caminaba sin mucho entusiamo. 

Yo quiero ser medico, no un héroe. Y no hace falta que aprenda a moverme en los ataques, nunca me hago daño.

Llegue a la clase y vi como todos me miraban fijamente, entiendo porque. Yo la cosa nueva de la clase, pero eso no hace que me sienta incomodo y con unas ganas de irme a mi casa y no volver.

- Midoriya -. Habló el adulto de la clase, seguramente el profesor -. Siéntate al final, en la mesa que esta al lado de la ventana.

Mire la mesa y era la única en esa fila, se notaba que lo colocaron recién ahí.

Camine en silencia mientras veía como me seguían mirando.

- Hola Midoriya -. Me habló una chica de pelo negro que se sentaba delante de mí -. Me llamo Yaouzuro Momo  y soy la sub delegada de la clase. Si necesitas ayuda en algo estoy aquí.

Asentí con la cabeza.

No tengo el valor para hablar si soy sincero, fue entrara al aula y quedar mudo. Algo en mi me pedía estar alerta.

Las clases eran normales, no había ninguna novedad, no había nada fuera de lo común en las materias. Eran las mismas clases que en su anterior escuela.

- Izuku -. Se giro hacia la voz y observo a Katsuki -. Nos toca clase de héroe -. Miro su reloj y era cierto, sé quedo tan embobado en sus pensamientos que se le olvido. Aunque lo que más le llamaba la atención era que le llamara 'Izuku', p or alguna extraña razón esperaba que le llamara de otro nombre.

Caminando hacia los vestuarios con él, observando la ruta e intentado aprenderla.

- ¿Tiene primos? -. Pregunto Bakugo dejando a Izuku desconectado de la realidad un minuto, su pregunta fue muy aleatoria para él -. Es solo que me recuerdas a alguien de mi infancia... es raro porque hasta que oí tu apellido nunca me había acordado de él.

- ¿Mi apellido? -. Preguntó sin recibir respuesta. En poco que quedaba del trayecto Bakugo dejo de hablar como si su mente estuviera absortó en lo que estuviera pensando.

Katsuki intentaba recordar aquel niño de apellido Midoriya, pero nada le veía a la mente. Solo una palabra podía recordar, solo una cosa que le llenaba de frustración. Le agobiaba la idea de que no podía recordar a esa persona, algo en él le rogaba que lo hiciera... pero también había algo en él que le pedía que lo dejara ahí.

Es como si una vocecita le dijera que si buscaba en sus memorias, solo encontraría la raíz que le provoco esa pequeña amnesia.