CAPÍTULO 44. En donde todo empezó

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Damián.

«—Algún día tendrás todo esto. Serás feliz, tendrás una familia, una casa, un hogar. Absolutamente todo Damián —expresa mi madre aun abrazándome.

Teníamos la mejor vista de la ciudad. Mi madre iba con un hermoso vestido negro que le llegaba a las rodillas, por supuesto sus zapatillas con incrustaciones de perlas y un collar de los mismos. Mi madre es una mujer demasiado hermosa y tenía una manera de vestirse que la hacía ver prestigiosa.

—¿Por qué nos mudamos de casa, mamá? —Digo contra sus abrazos.

—Es un pequeño cambio, amor. Papá tiene que hacer algunos cambios en el trabajo para estar más seguros —explica sin quitar esa sonrisa de su rostro.

—¿Por qué mi abuelo no quiere a papá? —La miro a los ojos—. Escuché que no lo quería vivo y eso me asustó mucho. Papá dice que el abuelo se está haciendo malo.

—Eres muy chico para conocer estas cosas. —Acaricia mi pelo—. Pero papá está haciendo muchas cosas para seguir en esta casa y que no nos quiten el dinero. Recuerda que tu padre además de cirujano tiene una empresa grande y gracias a eso tenemos esta maravillosa vida.

—Cuando sea grande quiero ser cómo papá —digo con orgullo.

—Tú serás el sucesor de tu padre, eres un Black después de todo. —Besó mi cabeza con mucho amor.»

—Rodrigo, una disculpa por el cambio tan repentino de planes, pero no podemos exhibirlos tanto tiempo. Las noticias en Italia rondan demasiado rápido y sin ayuda por parte de los Moretti están en peligro. Mía ya está en trasladó a Carolina —explica Luthor.

—Si no estamos en nuestro territorio todo se hará más grande de lo que ya es. Las autoridades de Estados Unidos nos están pidiendo cartas en el asunto. Se están dando a conocer muchas cosas —explica Rodrigo.

—Cómo siempre el país que se quiere ver perfecto será Estados Unidos. Sin pensar en toda la mierda que hay adentro —prosigue Luthor bebiendo una copa de champagne.

—Eso decía siempre mi padre. —Ríe—. Estados Unidos, la gran potencia hecha de mierda.

Ambos estaban riendo y compartían aquella botella. Pero desde que despegamos yo seguía en completo shock, los recuerdos bombardean mi cabeza. Cómo piezas de rompecabezas que con esas pláticas iban tomando un rumbo demasiado claro y en efecto, yo estaba viviendo en una completa mentira por parte de mi familia y por parte de los Moretti.

Nada es real.

Ahora dudaba de qué tan real es lo que sentía Lynette por mí.

Luthor, un tipo viejo lleno de canas y arrugas es la pieza maestra de todas las mafias, por eso los Moretti eran intocables. Luthor tenía el poder de destruirlos en un momento sin rechistar y quien sea que haya hecho tal atentado estaba claro que no conocía el poder que se tiene. Ahora sólo faltaba adjuntar las pistas que se tenían y la respuesta. La única respuesta podría tenerla Amy Moretti.

—Las respuestas las obtendrás en cuanto lleguemos —habla Luthor sacándome de mi trance—. No podemos darte la información completa si no tenemos las piezas reunidas.

—¿Lo conoces? —Miro a Rodrigo—. ¿Sabes quién es?

—Crecí conociéndolo, conozco su historia, su familia... —explica relajado. Cómo si no tuviera ningún peso bajo sus hombros—. Todos lo conocemos pero esos cambios tan bruscos me sacan de mis casillas.

—Era para darle emoción, muchacho. —Ríe Luthor completamente divertido—. Si ya me conocen para qué hacen planes conmigo.

Afirmó que vivo en una completa mentira. ¿Qué más había detrás de esto?¿Qué más tengo que saber y enterarme? Después de todo Lynette seguía teniendo razón, nada de aquí es cómo lo pienso o cómo creía que es. Esto es un maldito infierno y acaba de comenzar para mí.

Moretti © #1 Enemigos #PGP2024Donde viven las historias. Descúbrelo ahora