Capítulo 17: "Suave"

919 86 21
                                    

"— A partir de ahora... No vamos a separarnos... ¿De acuerdo...?

— Es una promesa..."

El cielo era azulado y las nubes esponjosas eran tan blancas como monchis de coco, el viento acariciaba con suavidad las hojas de los árboles que había al rededor de aquella cabaña. El ambiente era tranquilo y se podían escuchar las pequeñas y relajadas respiraciones de la pareja, la noche anterior había resultado muy dolorosa para ambos, al llegar a aquel lugar el demonio rosado no dudo en usar el antidoto que le proporcionó el joven demonio de mirada felina. 

Akaza abría sus ojos lentamente encontrando la habitación de esta en plena tranquilidad, observando los pequeños rayos de sol que entraban timídamente por las cortinas recordó la calidez y lo bien que se sentía el calor del sol. Respiro hondo y sentandose sobre el futón volteó a ver a su querido novio, el rubio dormía profundamente mientras abrazaba un pequeño tigre que habían encontrado en una caja de aquella habitación; el demonio rosado sonrío con dulzura y mirando sus manos se sorpendió, despues de inyectarse ambos antídotos tuvo un fuerte dolor de cabeza que lo obligó a dormir. 

Sus brazos esbeltos eran pálidos y aquellas características lineas que decoraban su piel habían desaparecido, buscó con la mirada algo donde pudiera reflejarse, caminó hasta las cajas buscando algún espejo u otro artefacto que le pudiera ayudar a verse mejor, sentía su corazón latir tan fuerte que golpeaba su pecho provocandole dolor.

Encontró un espejo mediano y observando su rostro se sonrojo, sobre su piel palida ya no se encontraban aquellas lineas que lo caracterizaban, en su lugar habían dos líneas azuladas sobre su cuello, sus pestañas rosas flamingo eran mas largas, su iris era de un hermoso dorado y en su pupila ya no se encontraba "Tercera superior" ahora estaba alargada como la de un felino, su esclerótica ya no era azulada ahora había adoptado el color de un ser humano común y corriente o al menos como un demonio decente. 

— Cambie...— susurró al ver su rostro, su cabello seguía siendo rosado y esos característicos colmillos eran los mismos, sin embargo, al verse mejor su rostro ahora era más brusca, su mirada era mas madura al igual que su cuerpo, trató de no reírse, ahora entendía el porque el demonio le había advertido que no tenía que dejar pasar tanto tiempo, si no afectaría su apariencia, ahora tenía el cuerpo de un joven de 25 años. Se observó por un gran rato y negando con la cabeza trato de no reír, ahora era más grande que Rengoku tanto en edad como aparencia — Ah... Bueno, no me veo mal... Me veo incluso mejor..~ — susurró divertido al verse en el espejo.

Era cierto, el jamás tuvo la oportunidad de crecer o verse como sus otros compañeros, él se convirtió en demonio a la edad de 18 años, él siempre tuvo 18 años. Se levantó de su lugar y acercándose a la ventana quiso sentir el sol nuevamente, pero no podía, se alejó y acostándose nuevamente con el rubio, rodeo sus brazos sobre la cintura del más chico y acurrucando su rostro sobre el suave cabello de su novio, sonrió y cerrando sus ojos se quedó dormido.

 Se levantó de su lugar y acercándose a la ventana quiso sentir el sol nuevamente, pero no podía, se alejó y acostándose nuevamente con el rubio, rodeo sus brazos sobre la cintura del más chico y acurrucando su rostro sobre el suave cabello de su ...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Los Demonios También Pueden Amar [AkaRen, RenKa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora