Alma Gemela. #1 | ScarlettWidow/WandaNat

Capitulo 8: Civil War parte 2.

Peggy Carter había muerto, la última pequeña parte del pasado de Steve se había ido y habia sido su funeral, no había tenido a nadie quien lo acompañara hasta que Natasha apareció a la vista.

— Cuando salí del hielo, pensé que todos los que conocía se habían ido. Luego descubrí que ella estaba viva. Tuve suerte de tenerla. — él comenzó.

— Ella también te recuperó. — Natasha respondió sonriendo.

— ¿Quién más firmó? — preguntó Steve.

— Tony. Rhodey. Visión...

— ¿Clint? —Preguntó.

Natasha se encogió de hombros

— Dice que está jubilado. — dijo con una leve sonrisa.

— ¿Wanda? — preguntó Steve con preocupación.

Natasha suspiró negando con la cabeza.

— Como si fuesen pocas las razones para discutir, agrégale esta... De todos modos, me voy a Viena para la firma de los Acuerdos. Hay mucho espacio en el avión. — Dijo Natasha codeando y brazo insinuando necesitar un acompañante.

— ¿Wanda lo sabe? — Preguntó.

— No, y es lo mejor para ella.

— No creo que debas ser tú quién qué es lo mejor para ella. — Steve la contradijo. — La mitad de la población tiene un alma gemela y tú y yo fuimos afortunados de tener una, lamentablemente yo hoy he perdido la mía. Espero no sea demasiado tarde cuando comprendas que no tienes la razón.

— El hecho de que sea el camino de menor resistencia no significa que sea el camino equivocado. Permanecer juntos es más importante que cómo nos mantenemos juntos. — Natasha dijo tratando de convencerse a sí misma también.

— ¿A qué estamos renunciando para hacerlo? —  Steve suspiró completamente negado. — Lo siento, Nat. No puedo firmarlo

— Lo sé... Yo solo espero no estar equivocada.

— Entonces, ¿qué estás haciendo aquí?

— No quería que estuvieras solo. — Nat volvió a sonreír

— Ven aquí. — él la abrazó.

Natasha se había ido sin comentarle nada a Wanda, aunque para cuando se fué ella ya esperaba que lo hiciera.

Cuando el edificio explotó y los escombros casi no alcanzaron su cabeza, Natasha supo que el enfrentamiento provisional que se había establecido entre Steve y Tony había terminado. Luego, cuando apareció la cara de Bucky en la televisión, Natasha supo que todo el infierno estaba a punto de estallar. Al menos esta vez no fue la cara de Wanda en la televisión la que se asoció con el edificio. Y aunque fuera horrible, le alegraba.

Natasha se sentía fuera de lugar en ese sitio, ser una asesina yendo a firmar acuerdos y dar la cara ante el estado era un puto fiasco para ella, sin embargo, lo hacía por Wanda.

El Soldado de Invierno fue programado para matar y Steve era su perro guardián. Los Vengadores fueron la primera víctima en lo que ahora se estaba convirtiendo en una guerra civil entre Tony y Steve, al menos agradecía que no fuese entre ella y Wanda.

Luego de la explosión y la muerte del rey, Natasha se encontraba sola en un parque esperando que el día pasará para volver a casa y solucionar todo con Wanda hasta que de repente escuchó su voz en su cabeza.

— “¿Qué tal Viena?” — Wanda preguntó con frialdad.

— “¿Por qué entras en mi cabeza cuando quieres pero yo no puedo hacerlo?” — Natasha le preguntó con molestia.