Planes Malignos (Dr. Robotnik x Lector/a)

20. Feliz cumpleaños (1)

Llegas a la cocina y te sientes feliz mientras tarareabas una canción. Stone ya estaba aquí, desayunando tranquilamente con un café con leche, el tuyo ya te espera en la mesa. Luego miras por un par de segundos hacia el agente con picardía.

Ya que estás aquí para trabajar con el Doctor, has entablado una sólida amistad con él. Te enseñó cómo trabajar con el Doctor y te advirtió sobre las cosas que debes evitar si no haces enojar a el mismo.

Sabías que hoy, para Stone, era un día especial. Llegando detrás de él, pones un panecillo en la mesa, frente a él.

—¡Feliz cumpleaños a ti, agente Stone!  —.Exclamaste acomodándote en el lugar junto a él, admirando su cara de sorpresa al ver la vela en el muffin.

—¡Oh! T/N, ¿realmente recuerdas esto?  —.Dijo, sorprendido, tu por otro lado asientes con la cabeza, satisfecho, cuando de repente la puerta de la cocina se abre bruscamente.

Robotnik había decidido comer al mismo tiempo que tú, su figura oscura se deslizó hacia la nevera para tomar algo de comida mientras el Agente Stone se apresuraba a prepararle un café con leche. Sin decir una palabra, vino a sentarse a la mesa, a tu lado. Siempre te había impresionado su carisma y, para ti, era un enigma.

Además, cuando lanzó una mirada extraña al panecillo y la vela, no pudiste determinar si era desprecio o curiosidad.

—¡Es el cumpleaños del Agente Stone, Doctor!  —.Exclamaste alegremente.

—No me importa.  —.Siseó secamente mientras ya se llevaba el café con leche a los labios. Te quedas en silencio, finalmente te acostumbraste a esta frialdad, pero sin embargo sentiste cierta fragilidad en ella.

—¡Vamos doctor! ¡Un cumpleaños siempre es feliz, haz un esfuerzo!

Te dirigió una mirada sombría, sus ojos color avellana traspasaron los tuyos y estuviste a punto de sonrojarte.

—¡No me importa el cumpleaños! Nunca tuve uno y me sienta muy bien.

Tus ojos se apagaron entonces. ¿Este hombre había estado solo hasta el punto de nunca celebrar su cumpleaños? De repente te invadió una gran tristeza. Miras tu plato, pero no lo tocas mientras el doctor termina su comida y se levanta sin decir una palabra.

Solía ​​comer su comida rápidamente y volvía a esconderse en su laboratorio. Luego te volviste hacia Stone.

—¿Te das cuenta?

—¿Cuenta de qué?

—El...El doctor, nunca celebró su cumpleaños...  —Ambos estaban sorprendidos y tristes por él hombre bigotudo.

—¿Cómo fue posible?  —.Dijiste.

—Te dije que el Doctor siempre había estado muy solo y...