Planes Malignos (Dr. Robotnik x Lector/a)

2. Evil Grows with love (2)

—¡Es la evolución Stone, es la evolución!

...

El sonido de un avión voló sobre su cabeza mientras se dirigía al campo de béisbol. A lo largo del viaje se preguntó que esperar de las fuerzas estadounidenses. Aunque ella tuvo la oportunidad de trabajar en el continente, el contexto había sido muy diferente y la colaboración fue de otro orden.Aquí el caso era tan importante para EE.UU que había enviado sus fuerzas especiales.

T/N estaba soñando despierta, ya había visto decenas de películas y series sobre el tema. Se imaginó encontrándose frente a tipos extraños todos vestidos de negro con gafas de sol, pero los estereotipos murieron fuertemente.

Observó por un momento el dibujo que el extraño del bar le había prestado por un tiempo indefinido. Ella no dijo nada en ese momento y sólo lanzó las cartas en el juego, el oficial de policía tuvo que admitir que era una locura total. Ella estaba cuerda, al menos tanto como podía y sin embargo, esa "cosa" que había dibujado "Karl el Dingo" podía estar fuera de la mente de un drogadicto en delirio total. No había nada humano es esta "cosa" o animal por cierto. De ningún modo, pero... ¿Había visto un erizo de este color?

—La vida salvaje americana es muy extraña... —.Siseó mientras continuaba caminando, a menos, por supuesto, que venga de otra parte.

«Absurdo», pensó al ver el campo de béisbol. Sin duda, América ya estaba allí, como había previsto su supervisor y habían puesto los medios necesarios para explicar lo que aquí estaba pasando. Vió vehículos militares y soldados deambulando por el campo en busca de alguna pista.

Pero lo que la desafío, incluso más que el sonido de los drones, fue el gigantesco camión de negro y los autos estacionados detrás.

—¡Ah, allí estás!  —.La voz de su teniente la sobresaltó, allí estaba él, frente a ella saliendo de la nada como siempre.

—Un día me matarás haciendo esto, ¿Sabes [nombre del teniente]?

—¡Lo siento comisionada, lo siento mucho! —.El teniente se confundió con excusas, pero T/N respondió con una sonrisa tímida. Ella conocía al teniente y aunque torpe, era una de las mejores partes de la Interpol y por eso insistía en estar aquí con ella.

—¿Me esperaban?  —.El teniente respiró mirando al cielo, sabiendo que una mala señal se aproximaba.

—Todo iba bien con el capitán del ejército,el mayor Berni...En fin, hasta que llegó ese camión y desde entonces...¿Cómo se explica sin ser grosero?

—Teniente, llevamos cinco años trabajando juntos, lo escuché mil veces siendo grosero, incluso con algo insignificante...  —.Se sonrojó entonces, escondiendo una tímida sonrisa entre sus labios.