Un pequeño de apenas 6 años estaba en el rincón de unos de los baños de la escuela llorando desconsoladamente, pues sus padres —que antes decían amarse y juraban amarlo infinitamente —se divorciaron, él apenas entendía el significado de esa palabra y no comprendía porque sus padres nunca estuvieron ahí, estaba tan confundido y perdido es sus pensamientos que no escuchó cuando alguien más entró a los baños, cuando menos se lo esperó tenía enfrente a un niño de más o menos su misma edad con una mirada extrañada puesta en él.
- ¡Hola! ¿Qué te sucede? ¿te puedo ayudar en algo? - acercó su manita, para que el otro pequeño pudiera levantarse del piso.
-yo...- tomó la mano extendida frente a él y lo abrazó de manera inesperada.
Taehyung se sorprendió, pero correspondió el abrazo de aquel niño que se encontraba desconsolado y se notaba que había llorado por horas.
Desde entonces aquellos pequeños fueron mejores amigos hasta que el chico de sonrisa de cajita se mudó a Europa a sus 15 años.
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—Yoongi, esto es importante este viaje debe de hacerse cuanto antes no debes faltar por nada del mundo — expresó el alfa mientras ojeaba unos papeles.
—No, no puedo en unos días es el cumpleaños de Yeonjun y no debo faltar— dijo con un tono de agotamiento.
—Pero debes hacerlo, ya preparé tu viaje y no puedes negarte.
—Kim Namjoon, eres una bestia sin corazón — Pensó ¿Cómo iba decirle esto a su esposo?
Yoongi ya estaba harto de todo esto, pero quería que su hijo creciera con un buen futuro asegurado.
Él iba a hacer lo necesario para protegerlo, pero ¿Sus acciones eran las correctas?
Ha estás alturas parecía un maldito Workaholic*, su familia peligraba y no estaba seguro si podría enfrentar toda esta situación.
—Presidente, el nuevo socio llegó — habló una secretaria alejando a Yoongi de sus pensamientos.
—Está bien-— se levantó de su silla y acomodó su saco, soltando un suspiro en el intento.
Al llegar a la sala de juntas estaban todos los inversionistas y entre ellos el "nuevo socio", que resultó ser una mujer omega, bien parecida y con una mirada presumida.
—Hola Yoongi-Ssi, un gusto conocerte Mi nombre es Kim Jennie —su tono fue asquerosamente coqueto. A Yoongi le incomodó, pero de todos modos la saludó.
Vaya que sería una larga reunión...
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Mientras tanto dos omegas y un pequeño de 5 años tenían una entretenida conversación mientras comían un rico helado.
—Dime Minnie, ¿Estás interesado en mi propuesta?
—Claro, quiero oírlo — asintió.
🥀
Después de la larga conversación Jimin se marchó a su hogar recibiendo una llamada de su esposo.
—Cariño, debo decirte algo — habló con algo de nerviosismo.
—Dime —respondió Jimin algo cortante, pues sabía a donde se dirigía todo este asunto.
—Voy camino al aeropuerto y volveré dentro de tres días —pausó el silenció se hizo presente al otro lado del contestador alarmando desmesuradamente al alfa —¿Hola? ¿Minnie? —trató de obtener respuesta por parte de su esposo.
—Está... bien —contestó dudoso —sabes que Yeonjun estará triste ¿verdad?—su voz se tornó sería.
—Prometo que llegaré lo antes posible— su tono fue suplicante.
—Yoongi, Yeonjun te extraña, trata de no perder a tu hijo ¿sí? —contestó con recelo y el ceño fruncido para luego colgar abruptamente la llamada.
—Te quiero —dijo Yoongi con resignación, para descolgar su teléfono, el alfa no se daba cuenta de lo erradas que eran sus acciones, pero en su mente estaba el futuro de su hijo.
¿Esto estaba bien? ¿Ese era su verdadero motivo? ¿Realmente lo necesitaba?
De repente sintió un fuerte dolor de cabeza esta no era la primera vez que esto pasaba, omitió el dolor que sentía, en un intento por firmar unos papeles.
El omega por su lado no pudo evitar soltar lágrimas de impotencia ¿Cuándo empezó todo esto y por qué? Su actitud e interés de recuperar su matrimonio caían ante todas sus inseguridades.
Corrección #1 Lun.,18 de julio 2022 659 palabras
*Workaholic El adicto (workaholic) llega a creer las justificaciones a las que recurre ante las quejas de su familia o de sus compañeros de trabajo y siempre encuentran una explicación a su exceso de trabajo.
