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Esa noche fueron uno solo en medio de sábanas revueltas y almohadas esparcidas por el suelo

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Esa noche fueron uno solo en medio de sábanas revueltas y almohadas esparcidas por el suelo.

No fue rápido ni mucho menos desesperado, sino suave y calmado. Querían disfrutar de cada segundo, cada sensación y cada melodioso gemido que salía de la boca ajena para poder guardarlo con amor en sus recuerdos.

Jeonghan fue el primero despertar debido a que la luz de la ventana se reflejaba en su rostro directamente. Se removió en la cama para estirarse, despertando a Joshua con facilidad.

─Buenos días ─sonrió sin abrir los ojos y acto seguido, abrazó a Jeonghan como un peluche─. ¿Dormiste bien?

─Sí. ¿Qué hay de ti?

─Siempre duermo bien cuando estoy contigo ─lo besó en la mejilla.

─Joshua, es muy temprano para empezar con tus cursilerías.

─Trato de ser romántico y tú me repeles como mosquito ─se quejó, dejando de abrazarlo.

─No te enojes, sólo digo la verdad.

Joshua se acercó un poco más a él.

─¿Sabes? Deberíamos considerar la idea de que vengas a vivir conmigo.

─¿Contigo? ¿Aquí? ─señaló el cuarto. Joshua asintió─ No lo creo, Josh. Apenas ayer nos hemos hecho novios, hay que darnos más tiempo.

─¿La semana que viene? ─sonrió como un niño ilusionado.

─No ─soltó una risita y se volteó un poco para mirar a Joshua, sin contenerse las ganas de besar su frente─. Hablemos de esto después. Es muy temprano.

─No, no lo es.

─¿Qué hora es?

Jeonghan observó vagamente la hora en su reloj y perdió todo rastro de sueño al ver que en veinte minutos debía ir a trabajar.

─¡Mierda! Tengo que irme.

─No te alarmes tanto, yo te llevo.

Aún así, Jeonghan se levantó de la cama de un salto y buscó su ropa esparcida en el suelo. Encontró su bóxer y sus pantalones junto a la cama, pero su camisa estaba manchada de semen.

─Joder ─maldijo entre dientes y mandó a volar la camisa─. ¿Me prestas una camisa?

─Claro cielo, están en los cajones de por allá ─señaló el armario.

El castaño se agachó frente a los cajones y comenzó a buscar una camisa de su talla. Al tomarla, se encontró con una libreta roja debajo de ella. Era la misma que Joshua traía la vez que fueron al parque de diversiones.

Las manos le picaron por tomarla y decidió hacerlo sólo por curiosidad. Sería una ojeada rápida para saber qué estaba escribiendo aquel día.

Bastó con leer las primeras páginas para saber que se trataba del diario de Joshua. Habían fechas viejas e iban subiendo de a poco, encontrando varias escrituras del año donde se conocieron.

Behind the scenes ✧ JihanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora