Capítulo 9 - La Duda del Uzumaki

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El Uzumaki apareció frente a Ramen Ichiraku e ignorando a los niños que había traído, se metió en el lugar de Ramen.

- Hola Naruto, ¿como estas? — Saludó Teuchi, el dueño del local quien aparentemente se encontraba solo atendiendo en este momento.

- Buenos días viejo, estoy algo cansado por el entrenamiento y estas alimañas — Saludó el Rubio señalando con su pulgar derecho a los niños que entraban detrás de él, mientras se sentaba.

- Espero que sepan que no tendrán comida gratis simplemente por traer al Nieto del tercero — Dijo Teuchi mirando como el trío se sentaba, Konohamaru a la derecha del Rubio y los otros dos a la izquierda del mismo.

- Exactamente por eso pagaré lo de los cuatro — Anunció Konohamaru intentando así estar del lado bueno del Rubio.

- Eso no suena como una buena idea, ¿verdad Naruto? — Preguntó Hayame entrando al lugar desde la parte trasera, con varios cuencos en manos.

- Que haga lo que quiera — Respondió el Rubio recibiendo un cuenco con Ramen de parte de Teuchi, consecuentemente empezando a comer.

- ¿Ustedes Que Querrán? — Preguntó Teuchi mirando a los chicos.

- ¡Lo mismo que el Jefe! — exclamó Konohamaru sonriente.

Teuchi y Hayame se miraron de reojo sin terminar de entender a quien se refería el niño.

- Me empezaron a llamar de esa manera tras enterarse que yo ayudé al Hokage a detener a Mitsuki — Explicó el Rubio ante la confusión de los del local.

- Esta bien, entonces serán tres Ramen de cerdo, ¡Enseguida! — Exclamó Teuchi empezando a cocinar el Ramen.

Tras la comida, tal y como prometió, Konohamaru pagó todo el Ramen, incrédulo de todo lo que había comido el Rubio.

- Bien, gracias Konohamaru, tal vez la próxima jugaremos a los ninja — Dijo el Uzumaki empezando a caminar alejándose.

- ¡Espera! — exclamó Konohamaru.

El Uzumaki al escuchar el grito se giró para ver al niño pequeño, notando que este estaba a tan solo un metro, luciendo agitado.

- Al menos enseñame un jutsu — Suplicó Konohamaru mirando al Rubio directo a los ojos.

Naruto cruzó los brazos y cerró los ojos por unos segundos, para consecuentemente y sin abrir los ojos, formular una leve sonrisa.

- Jutsu Sexy — Murmuró el Uzumaki transformándose en una voluptuosa mujer rubia totalmente desnuda.

El trío Konohamaru se quedó en silencio sin saber que decir o hacer, momento que aprovechó  el Rubio para volver a su forma normal e irse en un shunshin.

- ¡Viejo! — Exclamó Naruto entrando por la ventana de la Oficina Hokage.

- ¿Que pasa, Naruto? — Preguntó el tercer Hokage mirando al Rubio entrar por una de las ventanas.

- Necesito un Consejo — Respondió el Rubio tomando por sorpresa al anciano quien dejó los papeles que tenía en mano en el escritorio.

- ¿Sobre qué exactamente? — Preguntó el Sarutobi dejando de lado el papeleo.

- ¿Que equipo de los novatos podría estar bien con el doble de requisitos en los exámenes? — Preguntó el Uzumaki preocupado por sus compañeros de Academia, realmente no se juntaba con ellos hace bastante, pero eso no viene al caso.

- Naruto, me enorgulleces al preocuparte por tus compañeros, pero, no olvides que tendrán tu ayuda, no importa a quien elijas, solo dalo todo — Dijo el anciano intentando animar al Rubio, formulando una gran sonrisa.

- Esta bien, y una cosa más — Agregó Naruto asintiendo.

- Si, dime Naruto — Dijo el anciano esperando a que el Rubio continúe.

- ¿Cuando pensabas decirme que soy el hijo de Minato Namikaze, el cuarto Hokage? — Preguntó Naruto con una mirada sería, esa combinación simplemente hizo temblar al tercero, pensando en su respuesta.

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Nota: Lamento lo corto del capítulo, mañana me voy de viaje y no quería ir debiendo, el próximo Capítulo lo compensará.

La Pregunta del Uzumaki tomó por sorpresa a Hiruzen quien esperaba a que Naruto llegue a Jonin, ¿como responderá a esto?

Próximo capítulo: "La Merecida Explicación" la semana que viene.

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