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Los dos adolescentes y los adultos veían como el Doctor Connors se levantaba como un humano normal, dejando al mayor sorprendido.

— Miren nada más, ¿tú abriste un portal? —miró a Ned incrédulo.

— Si, señor —contestó nervioso, llevándose una muestra de aprobación.

Dejando sorprendidos a los tres que se sonreían entre sí, ¿Doctor Strange te acepto? Eso es increíble y nuevo.

La muchacha miraba de lejos como cada Spiderman hablaba con un ex enemigo, sonrió al ver que todo marchaba bien, pero sentía que se le olvidaba algo...o alguien.

— ¡¿Puede salir a jugar Spider-Man?! —una voz se escuchó.

Todos los presentes voltearon a ver cómo Norman Osborn se acercaba en su planeador listo para atacar.

Una batalla se desataba entre el Duende Verde y tentáculos (como se refería Ned a él), el hechicero intentaba recuperar la caja sin éxito alguno.

Cuando por fin la tuvo entre sus manos una bomba del duende estalló frente a Strenge, el menor de los tres grito el nombre del mayor con temor.

Aquella explosión tuvo como resultado una onda expansiva que soltó el escudo del Capitan America que derribó gran parte de la construcción.

Ambos adolescentes se tambalearon por el derrumbe, la mujer logró aferrarse a una tubería pero al ver como la chica estaba por caer corrió a su rescate dejando su lugar "seguro".

— ¡Michelle! —gritó asustada.

Corrió hacia la chica para jalarla hacia ella poniéndola a salvo, ella no tuvo la misma suerte y callo hacia el vacío.

— ¡____! —gritó la adolescente abrazando un tubo.

Caía con rapidez, el aire golpeaba su cuerpo con fuerza mientras gritaba por ayuda, el menor escuchó su llamado de auxilio y salto dispuesto a salvarla.

Vio con miedo el rostro de la chica, el cual reflejaba terror. Todo se volvió en cámara lenta, ella veía suplicante a su amigo pidiéndole internamente que la salvara o fuera toda una pesadilla.

Estiró su mano para tomar la de ella, pero el duende lo jalo con su planeador evitando que pudiera salvarla. Ella siguió con la mirada al castaño, resignada a morir cerró sus ojos con fuerza aceptando su destino.

No obstante el castaño del medio salto en su rescate, ambos cayendo en picada, el observaba cada detalle de su rostro con miedo teniendo un visible deja vú en su mente. Estiró su cuerpo lo más que pudo para tomar su mano y envolverla con su cuerpo.

Ella abrió los ojos con rapidez para darse cuenta que estaba segura en los brazos del arácnido, abrazo el cuello de él con fuerza para después sentir como aterrizaba en tierra firme.

El alejo a la muchacha para poder verificar su estado de salud, la examinó con la mirada y con sus manos, viendo que efectivamente estaba bien.

— ¡Te dije que no pasarás por el portal! —expresó molesto— ¡es muy peligroso!

Ella solo veía en silencio las expresiones de el, mostraba enojo pero en realidad estaba aterrado. Se calmó un poco para verla a los ojos con un semblante más tranquilo.

— ¿Estas bien..? —preguntó en un susurro, quería comprobarlo.

— Lo estoy, Peter —contestó en un pequeño susurro— ¿tú estás bien?

Las lagrimas lo traicionaron y soltó un sollozo traicionero, sin importarle lo que pasaba a su alrededor la enredó com sus brazos en un abrazo.

Ese gesto la tomó por sorpresa, pero aún así correspondió el abrazo con la misma intensidad que el.

¿Esto es real? [Peter Parker]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora