🐾Capítulo 8🐾

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"Una hermosa presa"

"Grupo de híbridos ataca a familia a las afueras de Seúl". "Una mujer fue secuestrada por híbridos, fue encontrada tiempo después con heridas múltiples". "Niños dan aviso de avistamiento de híbridos cerca de un lugar rural". "Antigua fábrica de textiles ha sido tomada por un grupo de híbridos". Todos, absolutamente todos, los periódicos locales contenían la palabra híbridos en sus titulares. Desde hace varios días que la prensa solo hablaba de ellos como la información más importante del momento.

Cho-Hee no sabía muy bien cómo actuar a estas alturas. Pensaba que las cosas no se complicarían, pero al parecer su pensamiento no se había hecho realidad. Al parecer los híbridos estaban comenzando con una nueva revolución luego de tantos años de estar sumidos en la oscuridad. Estaban luchando contra la especie humana en busca de su libertad. Y ella estaba totalmente asustada por los hechos que podrían ocurrir. SeokJin le intentaba calmar y explicar que tal vez solo eran inventos para llamar la atención y dejar mal a su pueblo, pero Cho-Hee a pesar de creer plenamente en las palabras del joven hombre, no dejaba de darle vueltas al asunto.

Ay, Jin, creo que ya va siendo hora de que vayamos a visitar a tu padre. Esto no puede continuar así, imagínatelo, cómo van sucediendo los hechos una guerra entre humanos y híbridos no se ve muy lejana. ¿Qué pasaría si de llega a dar? —Su tono sonó asfixiante, como si en su interior estuviera reteniendo las ganas de llorar. Y podía ser exagerada su forma de actuar, pero estando viviendo con un híbrido le hacía pensar que si llegaba a suceder algo, esos seres podían ser los que salieran más heridos.

El híbrido la miró preocupado. Estaban hace bastantes minutos sentados en el sofá sin decir palabra alguna. El silencio había reinado en la oscuridad, producto del temor de Cho-Hee a ser encontrados por los supuestos grupos que estaban atacando. No era verídico, o al menos eso quería creer, pero de todas formas tomar precauciones no estaba de más. A pesar de sus constantes explicaciones, también sentía un poco de miedo por lo que podría suceder.

Será mejor que vayamos a dormir. Últimamente te he notado muy tensa, dormir te hará bien para relajarte un poco —Evadió el tema un tanto molesto, no con ella, sino por el hecho de tener que visitar a su padre.

No quería admitirlo, pero una pesadez se formaba en su estómago con solo imaginar la figura de su padre ante él, rodeado en un círculo por su pueblo, quién más que mirarlo a él mirarían Cho-Hee, menospreciándola y viéndole de mala forma. Porque estaba seguro que la chica iría con él aunque buscara miles de maneras para que no fuese así.

Tenía un corazón muy puro, de eso estaba seguro. Así que no dudaría en ayudarle a pesar de que no se conocían hace mucho.

No quiero dormir, mientras duermo puede que alguien la esté pasando mal. Me siento inútil por no poder hacer algo —Formó un puchero con su labio inferior, como una niña pequeña a la cual no le entregan su juguete favorito. Tal vez la falta de sueño le está haciendo mal, pensó Jin, al no estar tan acostumbrado a aquella actitud infantil por parte de la chica.

Normalmente la vería más como una mujer, pero tampoco le molestaba que a veces pudiera parecer más pequeña e inmadura.

No siempre vas a poder ayudar a todos, es triste, pero así es la vida. Solo eres una persona, no puedes dejar tu bienestar por pensar en otros —Habló calmadamente, con suavidad para no molestarla.

Pero, Jin...quiso protestar.

—Nada de Jin. Pareces una cachorra actuando así, vamos a dormir y mañana despertarás como nueva, completamente relajada y bien descansada, ¿está bien? —Ironicamente, SeokJinin estaba actuando como su padre. Al percatarse de ello dio una baja risa.

¿De qué te ríes? No ha sucedido nada gracioso —su voz sonó más adormilada que hace instantes. Su ceño estaba medianamente fruncido, claramente el sueño la estaba venciendo por mucho.

—De tu forma de actuar —y de cierta forma hablaba en serio. Verla tan inocente y desprotegida no era muy frecuente. Se veía casi como una presa.

Con rapidez eliminó ese extraño pensamiento. Y como pudo tomó a Cho-Hee por la parte trasera de sus rodillas y su espalda, sujetándola con fuerza, elevándola del sofá sin mucho esfuerzo en verdad. La chica era casi como una pluma, y él no tenía una mala condición física. No era espectacular, pero haber cargado troncos en el bosque la había mantenido en un buen estado.

¡¿Qué haces?! —Chilló desesperada, agitando sus piernas frenéticamente.

Es algo obvio, te llevo a la cama. No has movido ni un dedo, así que supongo que debo ayudarte si por tu cuenta no lo haces —Sonrió para sí mismo cuando la persona que llevaba en brazos no chistó más, dejándose llevar hasta su alcoba en silencio.

Solo no me quejé porque estoy muy cansada —Habló ya con sus pies tocando el piso. Se dirigió hasta la cama para tomar su pijama que descansaba sobre las mantas, iluminadas vagamente por la tenue iluminación que venía del  exterior de la habitación—. Hum... ¿Podrías quedarte cerca mientras me cambio? Me da miedo estar sola sabiendo que algo me puede atacar.

Jin tragó sonoramente gracias a las palabras que acaba de escuchar. ¿Estaba hablando en serio o solo estaba bromeando? ¿Sería correcto quedarse con ella? Su mente comenzó a creer distintas fantasías relacionadas con lo que acababa de escuchar.

Una hermosa presa estaba ante sus ojos. Era inevitable que su imaginación no creara fantasías, claro que en ningún punto morbosas, solo un tanto... sobrepasadas en cuanto a la situación real.

Cuando sintió que ya se había excedido mucho con su imaginación, agitó su cabeza intentando disipar todo lo que había estado allí hace unos momentos. Cho-Hee era una humana, una amiga... no una presa para devorar.

Yo... estaré tras la puerta, si me necesitas solo llámame y entraré enseguida... —al terminar de hablar salió apresuradamente de la habitación, cerrando casi exageradamente la puerta, dejando un estruendoso sonido de un choque entre maderas.

Por otro lado Cho-Hee quedó mirando la puerta extrañada. ¿Acaso había dicho algo malo para que el híbrido actuara de aquella forma? No se podía explicar, pero tenía tanto sueño que no pensó mucho en ello y prefiero despojarse de su ropa para poder colocarse su pijama, y ponerse a dormir como tanto le estaba haciendo falta.

Cuando Jin entró nuevamente a la habitación, a pesar de que Cho-Hee no le había llamado para nada, la encontró acostada bajo las mantas, ya con su respiración más lenta y tranquila.

Sabía que necesitabas dormir —comentó mientras se sentó a la orilla del mueble, acarició con cuidado los suaves cabellos cortos de la chica, procurando no ser muy brusco para no interrumpir su acción de quedarse  dormida—. Duerme bien, Cho-Hee —la nombrada sonrió apenas, quedándose casi enseguida dormida por las suaves caricias que la habían relajado muchísimo.

Y aunque SeokJin aún continuaba muy tentado por su instinto animal, se dio cuenta de que su lado más humano también era lo suficiente fuerte como para impedir que cometiera alguna estupidez. Por lo menos en ese momento mientras Cho-Hee continuaba durmiendo tan pacíficamente y con esa mínima sonrisa que enternecía su corazón.

 Por lo menos en ese momento mientras Cho-Hee continuaba durmiendo tan pacíficamente y con esa mínima sonrisa que enternecía su corazón

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31/01/22

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