corazonada || jimin x yoongi

5

—¡Más contacto! ¡Toca sus glúteos! ¡Deja que te toque! ¡Tienen manos, úsenlas!

Sus gritos y mandatos ya me estaban cansando. Veía sus ojos oscuros temblar sobre mí. Yo estaba recostado y él en cuatro apretando sus labios sin saber qué hacer.

—No lo escuches — sus orbes se dilataron y se fijaron en mí, también dejó de temblar un poco —. Mírame ¿okay? Ignora a todos, menos a mí. Tócame y dejá volar tu imaginación, no te avergüences porque justo ahora pienso en como sería si tuviéramos sexo, así que el que se debe avergonzar soy yo — me apoyé en mis brazos para levantar mi torso y tener su rostro más cerca al mío —. Solo tú... y yo.

En un abrir y cerrar de ojos, me besó.

Tum-Tum Tum-Tum Tum-Tum

Mis labios estaban tocando los suyos y me encantaba. Podía oír como el bullicio había nacido y al fotógrafo moverse con emoción al rededor de nosotros con su cámara.

Mis párpados se separaron al sentir mis labios fríos. Me miraba. Su boca estaba un poco abierta y podía ver su rosada lengua y su respiración un poco agitada.

Estaba caliente y no era el único. Quería quitarme la ropa y desnudarlo a él también. Pero estaba en el trabajo, sería despedido por ser actor pornográfico en vivo.

—¡Que las llamas se enciendan! ¡Las tomas fueron excelentes, Jimin!

Esas palabras me alegraron tanto curvé mi torso hacia arriba ocasionando roces de mi pecho contra el pálido. Me tomó de sorpresa al él mover hacia adelante su mano para apoyarse y mirarme como un completo seme. Nuestros rostros estaban a nada de volvernos a besar.

Pero no fue así. En su lugar, nos pusimos de pié apoyando mi espalda en su pecho.

Mientras sacaban más y más fotos, yo solo me enfocaba en el chico pálido, tomé sus manos y las presioné sobre mi abdomen bajo, logrando que me abrace desde atrás, volteé sobre mi hombro para verle y él buscó contacto con mis ojos.

—¿Cuál es tu nombre? — me atreví a preguntar.

—Min Yoongi — respondió seco.

Le di vuelta a mi cuerpo, está vez nuestros cuerpos se tocaban casi a su totalidad, levanté la pierna derecha enrroscandola en su cadera, él me sustuvo de la cintura y su otra mano pasó a tocar parte de mi muslo y glúteo.

—Me llamo-

—Jimin, todos te dicen así, supongo que es tu nombre. Menos el chico del auto, te llama Mochi.

Le sonreí enternecido, acerqué mi cara a la curvatura de su cuello y susurré: —También puedes llamarme con un nombre especial, ¿no te gustaría Min? — dejé un beso y una pequeña lamida.

Dejé de oler su aroma y le miré a la cara, llevaba una mirada enigmática —No lo vuelvas a hacer.

—¿Qué cosa? — sonreí con un poco de malicia —¿Ésto? — y volví a consentir su cuello, le besé, lamí y mordí.

Como si de un gato grande se tratase, le oí gruñir. Iba a actuar más burlón, pero antes de poder hacerlo tomó mi otra pierna que era mi soporte y la subió a su cadera, por instinto le abracé fuerte de ahí y sentí por accidente sus genitales en mi entrepierna.

Me ruboricé por completo y no hacía falta un espejo para saberlo.

Tum-Tum

Ahora le veía desde arriba, esos ojos oscuros como una laguna profunda en la cual me sumergeria sin lugar a dudas, solo por experimentar esa excitante vibración que recorría mis nervios y mente perversa.

Un apretón en ambos glúteos me hizo jadear y tirar mi cabeza hacia atrás haciendo sobresalir la retaguardia para que esas grandes manos tuvieran más terreno para acariciar y estimular a su antojo.

—Park Jimin, ¿verdad? — bajé mi cara para ver la del chico gatito —No vuelvas a involucrarme en éste tipo de trabajo. Saldrás perdiendo, siempre.

—No lo creo, justo ahora estoy ganando mucha atención y contacto. Deberías saber que me encanta el contacto, pero no se lo permito a cualquiera.

Yoongi me bajó con cuidado; mi cuerpo hacia fricción con el suyo y sus manos recorrían toda mi silueta hasta tocar la suave alfombra con la punta de mis pies.

Entonces, le jalé de la mano intentando esconder mis intenciones, y en un buen ángulo, acaricié una sola vez su miembro con las yemas de mis dedos asegurándome de que ese acto no haya sido capturado.

—¿Ves, Yoongi? Nunca saldré perdiendo. — musité y pasé la punta de mi lengua por su mandíbula.

—¡Corte! — avisó el mayor mirando su cámara con una sonrisa de oreja a oreja.

Con una expresión pícara, acuné sus mejillas en mis manos —Nunca perderé. — hice un mojín entre sonrisas y me retiré dejándolo en blanco.

Tum-Tum Tum-Tum

¿Quién para presentarnos así? :>

•~• AFreeSoul94 •~•