¡Estás bien tal como estás!

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▶Esta historia estará narrada en primera persona para tener una mejor descripción. 


Un lunes por la mañana, estaba apunto de ir a la escuela. Me alisté, tomé mi mochila y mis audífonos para escuchar música mientras caminaba, siempre son buenas las mejores vibraciones para iniciar el día. 

Era invierno, todos tenían que ir en uniforme, en caso de las mujeres, en falda. En caso de los varones, con saco y pantalón gris. 

En la escuela secundaria, lo mejor que puede hacer uno es no hacerse notar ¿no? Es mejor evitar toda clase de problemas.

-¿Eh? -Sentí mi celular vibrar, alguien llamó. -¿Aló? 

-Hola T/n. 

-¡Ah! Hola Ran. ¿Qué tal? ¿Pasó algo? 

-No, la verdad que no. Solo quería saludar a mi persona favorita. 

-¿Qué quieres Ran Haitani? No sois de llamadas matutinas. 

-Que le digas al tutor de último año que no podremos ir, ni Rindo ni yo. 

-Bien , ¿pero llegarán al menos para el almuerzo? 

-No creo, tuvimos algunos problemas, pero trataremos. 

-Bien, espero que lleguen, hablamos después que ya llegué a la escuela. Adiós. 

Al cortar la llamada, me saqué los audífonos y llegué lo más rápido posible a mi salón. 

Al entrar, todo estaba calmado. Todos estaban sentados y alegres. Ahí estaba Mitsuya, siempre llegando temprano y sentándose al medio de la clase. 

-¡Mitsuya! 

-Hola. -Dijo Mitsuya con desgano. 

-Veo que no dormiste bien. ¿Qué ha estado haciendo? -Hablaba mientras me sentaba a su lado. 

-Estuve haciéndole uno que otro peluche a Luna y Mana. 

-Que lindo, me alegro. 

Mientras que ambos estábamos en el salón, vi que entraron Ai y su hermana Aiko, ambas luciendo su bonita falda azul, con sus medias largas blancas. Al parecer, ambas iban sin saco, se notaba que no tenían frío, al igual que podían observar los grandes atributos de Aiko y las anchas caderas de Ai. 

No soy de las personas que le gustaron compararse con cualquier tipo de persona, pero si lo pensábamos bien, Aiko tenia una personalidad falsa pero muy bonita, era alegre, divertida y siempre sabía como liderar correctamente un grupo de trabajo. Por otro lado, Ai es buena en los deportes, y siempre ganaba cualquier competencia de arte. Encima, tienen un cuerpo perfecto. 

-Mitsuya. 

-Dime. -Habló con un gran bostezo.

-¿Crees que soy bonita? 

-¿Ah? Si lo dices por Ai y Aiko, no deberías preocuparte.

-No, solo pregunto. Digo, ellas son bastante bonitas. 

-Si, son bonitas, pero no más que tú. Eso te puedo asegurar. 

-Mmm, gracias.

Sus respuestas de Mitsuya nunca eran seguras. El te podría decir que te ves bien, aún usando un trapo sucio. 

El resto del día, me la pasé pensando sobre aquel tema. Supongo que cada uno tiene sus días de bajones ¿no? En fin, las personas que pudieron decirte si estaba igual de bonita que Aiko y su hermana, eran los inigualables Haitani. 

One shots - Ran y Rindo Haitani 🔥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora