16. Secreto inconfesable.

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El momento más importante de la vida de todos los alters llegó esa madrugada. Todos se revolucionaron y Hermes, el alter masculino, tuvo que hacerse cargo de tranquilizar a los demás. Amber se puso al frente y llevó a cabo la tarea de parir a su hijo.

Fueron horas muy complicadas pero ansiaba ver al fruto del amor con Vegeta. Cuando el niño nació no respiraba y Amber temió lo peor, hasta que un sonido estridente envolvió la sala de partos, el bebé lloraba.
Al oirlo Amber se desmayó y su amigo del alma se hizo cargo de la situación. Goku llegó y junto a Milk se encargaron del bebé y la extenuada madre.

—Debo decirle a Vegeta.—dijo Goku susurrando.

—Lo sé, pero ellas no querían. Aunque es mejor que le avises, él tiene que estar aquí.—respondió Milk.

Kakaroto salió de la habitación, tomó su teléfono y marcó el contacto, esperando que Vegeta siguiera teniendo el mismo número, luego de tantos meses. Intentó varias veces, hasta que al cuarto intento recibió respuesta.

—¿Que sucede?— la voz del otro lado de la línea se oía adormilada.

—Tengo noticias. Ven a verme urgente.

—¿Son noticias de Bulma?

—¡Ven rápido al hospital!

Vegeta se alistó para salir, como pudo se despabilo y tomó su auto de camino al hospital donde trabajaba Kakaroto.
Mil ideas pasaron por su cabeza, pero jamás estuvo listo para todo lo que le contaron sus amigos. Cada novedad era un baldazo de agua fría. Antes de que colapse por completo lo llevaron a conocer a su hijo. Estaba en una incubadora, el infante en cuanto se sintió observado por su padre comenzó a llorar, y fue Milk quien le presentó el bebé. En ese instante, el tiempo se detuvo y él solo se puso a llorar.

—¡Felicidades Vegeta! es un niño muy fuerte. En los próximos días podrás cargarlo.— dijo Kakaroto.

—Se parece mucho a ti.— dijo Milk interrumpiendo al flamante padre. —Te dejaremos un momento a solas con él. Estaremos afuera.

Miles de pensamientos se agolpaban en la cabeza de Vegeta, pero no quería darles lugar. Hasta que una de las enfermeras vino a revisar al bebé y le pidió que espere afuera. Él aprovechó para hablar con Milk sobre Bulma.

—¿Cómo está ella? ¿Como pudo superar el embarazo sola?

—La verdad, no sé cómo llevó a termino su embarazo. No supimos de ella hasta hoy.

—Creí que al menos a ti te había buscado.

—No fue así. Se las arregló por su cuenta todos estos meses. De verdad la creí muerta. Hasta que hoy a las 2 am recibí una llamada de Melissa. Me advirtió que nos necesitaban a Goku y a mí para asistirla en el parto. Quedé tan en Shock como tú, no sabía que estaba embarazada.

—Yo menos. Estuve todos estos meses culpandome por su muerte. Sintiéndome miserable mientras ella solo se ocultaba de mí. Siento rabia y alivio. No sé que sentir.

—Todos estamos igual, pero seamos positivos, la vida te la devolvió y vino con premio extra.

—Lo sé, no debo enojarme con ella, pero aún así. Siento una maraña de sentimientos, ¿el niño estará bien?

—Descuida es un niño fuerte. Nació algunas semanas antes, pero estará bien.

—¿Puedo verla?

—Se desmayó luego de parir. A decir verdad el niño no respiraba cuando nació y eso la tensionó. Pero en cuanto lo oyó llorar, se desmayó.

—Necesita a su psiquiatra, está muy vulnerable, sería mejor que hable con él, para ponerlo al corriente.

—Yo creo que si. Es mejor que retome su tratamiento cuanto antes. Descuida Goku y yo te ayudaremos en todo lo que podamos. Jamás estarán solos.

MEMORIA FRAGMENTADA                            Vegebul [Libro 3]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora