Capítulo 7. Vivir con la verdad cuesta.

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⚠T/W: asalto, armas, ataques de pánico

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⚠T/W: asalto, armas, ataques de pánico.⚠

Voy en el auto con mamá hacia el centro comercial, mi ánimo sube bastante con el ánimo. Ella canta canciones de Michael Jackson y yo veo el paisaje.

Llegamos al centro comercial y pasamos a la primera tienda, que es de insumos del hogar, pero, aunque a veces jamás compramos cosas aquí a ambas nos entretiene pasar.

—Mira, Ima —Dice mi mamá emocionada—, una ducha con luces de colores.

—Wow, no sabía que existían.

—Llevémoslo.

—¿En serio?

—Sí —Ríe—, hay que aprovechar que ayer me pagaron.

Seguimos recorriendo la tienda y vemos cosas súper raras, como cuadros con forma de león y cosas raras no muy apropiadas para todo público.

Salimos de la tienda con la ducha de colores (la compra más rara que he presenciado, la verdad) y mamá para en una tienda de maquillaje.

—Entremos —Me toma la mano y caminamos a dentro de la tienda, se le ve bastante emocionada, y eso hace que yo también me emocione—. Ima, ya tienes 16, pronto cumplirás 17, y sé que algunas chicas a tu edad se maquillan... yo misma lo usé, bastante la verdad.

—¿En serio? Ahora no usas nada.

—Preferí dejarlo, con la edad dejas de preocuparte del maquillaje, y empieza a darte flojera quitártelo cada vez que te maquillas —Ríe.

—¿Y tienes fotos de cómo te maquillabas antes?

—Oh no, eso sí que no. Esas fotos de seguro las escondí hace años y ya ni me acuerdo dónde estarán, no me quieres ver en mi etapa de creerme Madonna, porque la verdad, no me parecía ni un poco.

—Le preguntaré a papá si sabe dónde están.

—Quieres reírte de mí, eh —Ríe—. Bueno, la cosa es que, si es que tú quieres, te compraré tus primeros maquillajes. ¿Qué te parece la idea?

¿Que qué me parecía? Jamás he usado alguna vez maquillaje, aunque he visto a Taylor usarlo... a quién engaño, me encantaría poder maquillarme.

—Me encanta.

Ella me sonríe y pasamos por los diferentes pasillos. Compramos un rímel, un encrespador de pestañas, un delineador negro, sombras de colores nude y labiales de color rosa y rojo... creo que mamá se tomó en serio la parte de aprovechar de que ayer le pagaron, pero no me quejo.

Salimos de la tienda después de pagar cuando mamá me pregunta:

—¿Quieres ir a tomar helado?

—Claro —Jamás desperdiciaré un momento para comer helado.

Mientras vamos hacia la heladería del centro comercial veo a un chico un poco mayor que y mirándome fijamente.

Raro.

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