Qué verdades escondes León? (Alex x Vitaly 1ra Parte)

Iniciar el Viaje/ Dolorosa Sorpresa

Capítulo 35

Narra Vitaly

Pasaron cinco días desde que terminó la guerra. Tai-lung y Tigresa debe viajar a China en dos días, ambos ya Están bastante mejor de sus heridas pero aún no han sanado del todo. La situación por la que viajó la hembra de rayas se nos explicó a Alex y a mí a causa de que pidieron permiso para irse.

Mi Rey a visto a Tigresa muy inquieta con la idea de viajar, me ha dicho que ve pesar en ella, pero también el deseo de volver, es tan extraño la forma en la que lee a los animales tan fácilmente.

Estamos llendo a verlos a la enfermería ya que Alex quiere hablar seriamente con ambos felinos. Hay algo maquinando en su cabeza, aún no me lo ha dicho, pero me hago una vaga idea de lo que puede ser. Ya considera a Tai-lung y a Tigresa miembros de la manada, se ganaron su confianza, y un verdadero jefe protege a los suyos, si lo conozco bien debe pensar lo que creo.

Mientras nos acercamos podemos escuchar parte de su conversación, Tigresa luce algo afligida.

-....Shi-fu no lo sabrá, nadie tiene porqué saberlo, tampoco hay forma se que de entere. Despreocupate.- Tai-lung le habla con confianza intentando calmarla.

- no lo entiendes, él me crió, sabrá cómo leerme, se dará cuenta que hay algo diferente en mí....de alguna forma lo sabrá.

-y qué si lo sabe, no hay cómo remediar el pasado. Solamente puedes cargar con eso hasta que te acostumbras a que esos demonios están allí, y ya no te pesan ni te atormentan....-creo entender de qué están hablando.

-pero y si me juzgan? Y si al saberlo me da la espalda? No soy tan fuerte como tú Tai-lung, no soportaría ver su rostro de decepción....si me enjuician y voy a prisión yo....-Alex la interrumpe hablando con seguridad.

-si lo que hiciste aquí sale a la luz e intentan enjuciarte abogaremos por ti. Si aún así te llevan a prisión te ayudaremos a escapar. A mis ojos ya eres una de nosotros, te ganaste mi respeto y mi confianza, incluso si te exilian de China da por hecho que aquí te recibiremos con los brazos abiertos. Ser una fugitivos sería un requisito para unirte, pero ya serían formalidades.- las palabras del León le roban una sonrisa a la hembra, está agradecida lo veo en sus ojos.

-Gracias Alex, pero no creo que puedan abogar por mi en un juicio si es tan tan lejos, a menos que me lleve una carta de ustedes aún así no sé si lo tomarán en serio.

- por ése motivo Vitaly y yo iremos con ustedes...-la expresión de sorpresa de todos es notable, yo ya imaginaba que ése era su plan.- ya te lo dije, si las cosas se complican te ayudaremos a escapar.

La hembra de rayas le da un tímido abrazo al León haciendo que sonría, la verdad ella tampoco es de las demostraciones afectivas. Pero esta vez, hay mucha sinceridad en ése abrazo, el agradecimiento es palpable.

Antes de partir, Alex le dejó el mando de la reserva a su padre hasta que volvieramos, mientras que le encargó a los pingüinos vigilar con las aves y los perros toda la reserva por aire, el entrenamiento de los jóvenes que se preparaban con nosotros tendría que esperar, mientras tanto podrían ser evaluados por Qhana y Terk aunque la gorila mayor aún no pueda luchar.

Nos íbamos seguros de que nada pasaría, al menos por un tiempo. La mayor amenaza la habíamos eliminado. Los que seguían nuestro rastro ya no serían una molestia.

Una vez emprendido el viaje nos colamos en un tren de carga para poder llegar a India, como no hizo ninguna parada, en dieciocho horas llegamos a la estación. Cubrimos nuestros cuerpos con tela, aprovechando la vestimenta tradicional de los lugareños para camuflarnos. Conseguimos subir a un avión clandestino que nos dejaría en el limite de China y Mongolia. Ninguno de nosotros conocía esas tierras excepto por Tai-lung y algunas zonas específicas Kiva.