Isabela

1.7K 74 9
                                    

A Encanto había llegado una nueva familia. Huyendo de problemas que nadie conocía aún, un importante ex- abogado y sus 2 hijos llegaron a Encanto durante una madrugada, tocando en la puerta de la familia Madrigal para pedir refugio. Claro que se les fue otorgado, permitiéndose que se quedaran en el cuarto de visitas de Casita.

A la próxima mañana, las familias se conocieron. Jacob Ríos era el nombre del abogado, acompañado por los gemelos, Dalia y David. Tenían la edad de Isabela y no se separaban nunca. La familia quedó encantada con todos, pero Isabela era la que mejor parecía llevarse con el par.

Camilo- Isabela, parece que te gusta Daviiiid- canturreó un día que los vió hablar por varios minutos sin parar.

Isabela- ni me había pasado por la cabeza, idiota. Él no me gusta.

Camilo- ay claro que sí, no puedes mentir. Vi como hablaban sin parar de algo.

Isabela- En verdad... le estaba preguntando algo acerca de su hermana. Quería saber qué flores le gustaban a Dalia. Y... le hize un bouquet.

Camilo se quedó en silencio unos segundos, hasta que oír fin levantó las cejas en entendimiento.

Camilo- OHHH, oséa que- comenzó a susurrar- ¿te gusta ella?

Isabela- si, pero no le digas a Abuela

Camilo- no soy un monstruo Isa, yo te mantengo el secreto

Isabela sonrió, algo nerviosa
Isa- gracias primito

*Minitos después*

Isabela encontró a Dalia en el cuarto de visitas, hablando con su hermano. Él rápidamente salió del cuarto, pues ya se había dado cuenta que algo había entre ellas.

Dalia- heyy, ¿que haces por aquí?-.jugaba con sus manos nerviosamente

Isabela- Bueno, resulta que estaba practicando, e hize este montón de Dalias y Rosas, y recordé que habías mencionado que son tus favoritas.

Dalia- ¿lo hize? no lo recuerdo

Isabela sentia su corazón latir como si estuviera cubriendo a Luisa en algún trabajo- bueno, tu hermano lo hizo, pero... yo no lo pregunté

Dalia- seguro...

Isabela- el punto es que me gustaría dártelas

Dalia sonrió, un poco menos nerviosa y más entretenida con la obvia mentira que Isabela había soltado. Se acercó a ella y tomó el bouquet.

Dalia- gracias- dijo suavemente y la besó en la mejilla.

Isabela quedó en shock un momento, para luego salir corriendo.

Isabela- ok, ¡adiós, para siempre!

One Shots La Familia Madrigal (Encanto)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora