Los días posteriores a la muerte de mis amigos habían sido de lo peor, no tenía ánimos de nada pero tenía que cumplir con mis obligaciones, así que no tenía muchas opciones que seguir pero los días parecían ir mejorando poco a poco.
Era viernes en la tarde y me encontraba tirada en mi patio trasero mientras escuchaba música esperando calmar un poco mi mente y poder descansar un poco en el proceso, el atardecer estaba llegando y estaba contemplando las diferentes tonalidades que tenía el cielo, desde moradas hasta un naranja muy suave, también estaba viendo las nubes que parecían correr arriba de mi cabeza y algunas les encontraba formas raras.
Estaba tan perdida en mi mundo pero el ruido de la puerta trasera abriéndose me hizo levantar mi cabeza encontrándome con Ellie que venía hacia mí con una manta en las manos así que regrese mi vista hacia el cielo.
— Hola... te traje esto porque está empezando a hacer frio
— Gracias ¿Quieres acompañarme? *palpé el pasto al lado mío*
— Claro
Pensé que se iba a acostar en el pasto a un lado mío pero me sorprendió acostándose sobre mí y cubriéndose con la manta haciendo que las 2 entráramos fácilmente en calor.
— ¿Todo bien? *pregunte mientras la abrazaba atrayéndola más a mi cuerpo*
— Si, solo quería cariño de mi novia
— Pues a ver empezado por ahí *le empecé a hacer mimos en su cabeza y pude sentir como su cuerpo se comenzaba a relajar y su respiración se hacía más pesada*
Mientras estaba acostada dándole mimos a mi novia me puse a pensar en donde estarían esas personas que conocí y ya no estaban con nosotros, seguramente Tess estaría en algún lado atendiendo una cafetería ya que una vez me dijo que ese era su trabajo antes de la pandemia y que le encantaba, también estaría reunida con su familia así que estaría el doble de feliz, Sam y Henry estarían disfrutando de una barbacoa en el jardín de su casa, refrescos en una hielera, una sombrilla roja y de franjas blancas protegiéndolos del sol y el olor de la carne preparándose en el asador, sin duda se la estaban pasando de maravilla, mis padres... ojala y estén ardiendo en el infierno, Kaoro tengo la impresión que está de fiesta, mucha luces en todo el entorno, a ella le encantaba vivir en la fiesta, estaba en su ser, estar bebiendo bebidas refinadas; como ella les decía a sus mezclas raras, y bailando hasta que no sintiera los pies y por ultimo Marcel... el sin duda estaba con su hermano menor cuidándolo y teniendo la vida que no pudieron.
Seguía perdida en mis pensamientos solo que ahora me puse a recordar en mi vida antes de conocer a Ellie, como era un día normal, en como el simple hecho de tener comida a veces era una fantasía, seguía recordando y cuando llegue a momentos con Tess me di cuenta que ya no recordaba su voz, por más que tratara de recordar nada venía a mi mente, simplemente la veía y como se movían sus labios pero no escuchaba nada.
(¿Tan rápido pude olvidar como sonaba su voz?)
Ahora mismo lo que más quería era un abrazo de Tess y una palmadita en la cabeza diciéndome que todo iba a estar bien, mientras ella estuviera conmigo, ¿Pero ahora que ya no lo estaba? Sin ella toda mi vida se estaba yendo de cabeza, mi ex novio resulto ser un tipo súper violento y aparte problemas con la bebida con el que solo saber que me lo he topado más de una vez en la calle me pone los pelos de punta, mis 2 amigos más sinceros que había llegado estaban muertos, lo único bien que tenía en mi vida era la pelirroja que estaba en mis brazos, mi hermana y mi padre.
— ¿Lex? ¿Estás bien? *las palabras de Ellie me sacaron de mi trance y solo baje la mirada para verla*
— Si ¿Por qué? *pregunte tranquilamente mientras quitaba un mechón que estaba en su cara*
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Protect me | Oc X Ellie
FanfictionLex es una niña de 14 años que se las arregla para sobrevivir el día a día en la zona de cuarentena en Boston, pero en unas cuantas horas todo su mundo cambiará y no solo el de ella. Este fanfic está basado en el juego de consola The last of Us y Th...