En un cielo violeta a punto de estar estrellado, ves una silueta danzante en aquel firmamento perlado. En un principio aturde, aquella figura pintada de rojo anaranjado, que contrasta con el escenario celestial.
Y es ahí, donde ves con claridad, calma y asombro, una danzante bailar con un vestido de color vulpino, con las estrellas cayendo en lágrimas de astros y nieve cósmica. Mas no das cuenta que, la pieza que ella bailaba era de pares, y en ese instante comprendes, allá aguarda por ti.
Tomados de manos y dedos entrelazados, un espejo frente a los ojos: te ves en su rostro. De maquillaje difuso y máscara disfrazada de tu persona, un zorro sobre la noche y el fuego consumiendo la luna en donde giran unidos.
Perla y arena cayendo cual lluvia, asteroides que hielan la atmosfera y el sol con forma de mujer; varias colas que alumbran como farola. Sabes que eres quien se posa allá en lo alto sin siquiera sentirlo, aquí en la tierra, un simple mortal considerada de otro mundo.
Lo comprendes luego de admirar aquel teatro de nebulosas y fuego solar, es solo un espejo tras 24 veces que danzaste sobre ti misma. Más allá del límite y más cerca de lo que imaginas, tú en forma fueguina blanca, astuta y fina, sobre las rocas que mojan el mar, y el agua que áspera la piel: Tu esencia en el cosmos, te miras a ti.
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Cantos de un corazón fragmentado
NezařaditelnéLas voces de las sirenas recurren a mis dedos. Cuentos, relatos y poemas. Todos independientes el uno del otro y, a la vez, tocando temas similares entre sí. Cantos de un corazón fragmentado es la segunda recopilación de cuentos y prosas que comien...
