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Pasé un paño con agua por el rostro de Aaron, limpiando el golpe que se había dado en el suelo del granero.

— Le dejarás una marca, de seguro. — miré a Rick.

— Por favor. — Rosita habló. — Estábamos buscando un lugar dónde iniciar una comunidad, ¿no es así? Aquí nos ofrecen una ya lista.

— No es tan sencillo.

— Tenemos dos opciones. Creerle o no creerle. — Maggie se acercó a Glenn.

— No le creeremos. — Rick negó.

Coloqué un parche en el pequeño raspón de su frente y luego vi sus ojos moverse bajo sus párpados.

— Está despertando.— avisé.

— Para atrás. — Daryl me tomó del brazo y me hizo retroceder.

No sabíamos cómo reaccionaría después del golpe.

— Fue un buen derechazo, Rick.— hizo una mueca y le dedicó una pequeña sonrisa.

Observé a Rick y se veía realmente alterado por la presencia del extraño.

— ¿Cuántos de los tuyos están ahí afuera? — la sonrisa se borró del rostro de Aaron.— Tienes las bengalas para enviar una señal. ¿Cuántos son?

Aaron tomó una gran respiración y me miró, y luego a la persona detrás de mí, casi pidiéndonos parar la situación. Moví mi cabeza hacia los lados lentamente.

— ¿Eso tiene importancia? — volvió su vista al líder.

— Sí. Claro que importa. — Rick ladeó su cabeza.

— Quiero decir...sí importa. ¿Pero la situación cambiaría si te dijera la cantidad exacta? — lo cuestionó. — No importa lo que diga, no van a confiar en mí.

— No confiamos en nadie que sonría después de un golpe

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— No confiamos en nadie que sonría después de un golpe.— Daryl habló.

Mi cuerpo se estremeció, dado que no me había percatado de la cercanía que tenía.

— ¿Ni siquiera si les deja una caja de comida en el camino? — observé las reacciones de todos.— Soy un amigo.

— Un amigo que nos espía. — aclaré.

— ¿Desde hace cuánto nos están siguiendo? — Glenn se acercó, dado que vigilaba por entre las tablas para ver si alguien venía. 

— Lo suficiente para ver que casi ignoran a un grupo de errantes que los seguía y hasta unos días antes. — tomó una rápida respiración. — Lo suficiente para ver que aunque no tenían comida ni agua, nunca se atacaron entre ustedes. 

— Eso dices tú. — Abraham susurró, pero logré escucharlo.

— ¿En serio, ahora dices eso? — Lo miré con una ceja alzada. 

𝐋𝐎𝐘𝐀𝐋𝐓𝐘 || 𝙳𝚊𝚛𝚢𝚕 𝙳. /𝙽𝚎𝚐𝚊𝚗 𝚂.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora