Chapitre 8 | Tout comme Bonnie et Clyde

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Normalmente cuando uno está en las calles desde muy joven, la esperanza de un futuro prometedor se ve opacada de muchas maneras y yo, mejor que nadie, lo sabía. Muchas veces la mejor opción para algunos, era la condena para otros.

-Ninie oppa!
-Hey, mi pequeña hermosa, ¿Cómo está mi princesa?
-La maestra dijo que quería hablar contigo, te dejó un recado en mi libreta.
-¿En serio? ¿Sucedió algo hoy con ella? -MinJeong agachó la cabeza y se fué a su habitación. Suspiré pesado y caminé a la cocina, dejé la despensa en la mesa y comencé poco a poco a sacar las cosas y guardarlas en la alacena. Min regresó y me mostró su pulsera rota-. ¡Minnie! ¿Cómo se rompió, mi niña?
-Un niño de mi salón me la quitó, Aeri me estaba ayudando a ponerme la y él se la arrebató. Aeri no se dejó y en la pelea se rompió... Me enojé con ese niño y lo empujé. La maestra lo vió y te mandó a llamar. La señora Yu me dijo que te dijera.
-Cielos, ¿no te hizo nada a ti? -acuñe su cara entre mis manos y revisé si no tenía nada. Sus brazos estaban limpios y no tenía ningún arañón. Ella negó y me mostró su pulsera.

MinJeong se veía realmente triste y apenada. Miré la pulsera en mi mano y negué con la cabeza- Jeongie, lo que hiciste estuvo mal, pero ese niño tampoco debió hacerlo. Entiendo que estuvieras molesta y es válido sentirse así, pero eso no te da razón para lastimar a los demás. Mañana hablaré con tu maestra para que te hagas responsable de lo que le hiciste a ese niño y le des una disculpa. Mientras tanto... ¿Por qué no te sientas en la mesa conmigo e intentamos reparar juntos la pulsera de mamá? -MinJeong se levantó emocionada y corrió por la caja de herramientas que teníamos, la colocó en la mesa y se sentó en la silla ahora sin mi ayuda. La miré sonriente y tomé las pinzas, abrí uno de los eslabones y lo uni con el del otro lado. La pequeña placa con las iniciales de nuestra madre, y que compartía con nosotros dos: LM, relucía brillante en la delgada muñeca de MinJeong.

-Listo, ¡como nueva!
-¡Gracias, Nini-oppa!
-No es nada, Princesa~

MinJeong había crecido demasiado en los últimos años. Había pasado de ser una niña de apenas 20 meses a una niña grande de siete años recién cumplidos. Tomé su mochila y saqué la libreta para poder leer el recado que había dejado su maestra para mí. Sí, para la maestra lo había visto como una pelea en dónde mi hermana había sido la culpable de que la pelea fuera hasta los golpes. Firmé de enterado y dejé las cosas en su lugar, no tenía ninguna tarea pendiente y tampoco algún otro mensaje para mí.

-Jeonggie, ven, iremos a hacer unas cosas -MinJeong llegó corriendo a donde estaba y tomó mi mano sonriente-. Creí que no querrías salir. Ponte el abrigo y tus zapatos. Iremos a ver a un conocido, mi niña.

Tomé las llaves del auto y nuestros abrigos, todavía estábamos en invierno, y lo que menos quería era que MinJeong se enfermara. La coloqué en su asiento y abroche su cinturón.

-¿Conoces la universidad de Yonsei? -ella negó- bueno, todavía no es tarde para conocerla. Recuerdo que hace unos meses me habías dicho que querías ser doctora, ¿no es así?
-Quiero ayudar a las personas, la maestra nos dijo que los doctores leen mucho y deben estudiar todo el tiempo.
-Sí, los doctores deben practicar y aprender todo lo que puedan sobre sus pacientes, los doctores son muy importantes, sino ¿Con quién vas cuando te sientes mal?
-¡Con los doctores!
-¡Exacto! Ellos son muy importantes, y seguro que tú también serás muy importante elijas la profesión que elijas, mi princesita hermosa.

Dejé el auto en el estacionamiento y me apresuré para ayudarla a bajar. Tomé su mano y juntos caminamos dentro de las instalaciones. No conocía el lugar, pero por lo que había logrado investigar, conocía su grupo, semestre y también el edificio. Ahora solo faltaba encontrar en edificio y el salón.

-¿Tu conocido es doctor? ¿Te sientes enfermo Nini-oppa?
-No, linda. Es estudiante todavía, quizá en un futuro él sea el que te atienda a tí.

La universidad se veía cara y sofisticada, algo por lo que seguramente tendría que ahorrar toda mi vida para poder pagarle a MinJeong.

Hide & Seek | Minsung AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora