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Los alimentos llegaron a cada plato y todos empezaron a comer, menos George, quien seguía pensando sobre cómo todo había sido demasiado rápido, pero según él lo hacía por el bien.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por su padre, George sintió una punzada en el pecho cuando mencionó los nombres de los jóvenes.

—Clay, George. — Habló el rey dejando sus cubiertos en su plato. — ¿Desde cuando llevan esta relación?

—Uh...

—Unos cuantos días. — Respondió Clay por George.

George tomó un poco de agua, pero casi se ahoga al escuchar la siguiente pregunta que haría el rey.

—¿Tienen pensado cosas para el futuro?

El rubio notó el comportamiento de el menor, así que decidió contestar él para no darle presión a George, ayudándole tomándolo de la mano por arriba de la mesa, donde podía ser visible.

—Hasta ahora solo queremos estar juntos a ver si sucede algo más en el futuro, al menos yo espero con ansias pasar mi futuro con George.

Aquellas palabras se sintieron como un alivio en la mente y corazón confundido de George, sintió una gran calidez. Pasó su mirada al mayor, este le correspondió con una sonrisa.

—¿Y tú, George?

Aquella pregunta lo obligó volver a mirar a su padre, ahora menos nervioso.

—Yo igual espero algún futuro con él.

Todos en la sala sonrieron, sintiéndose felices de aquellas respuestas y sobre todo, porque veían a sus hijos felices.

『◇』

Después de la comida, Clay y el rey se habían ido a una charla, a George le preocupaba de que sería aquella platica pues su padre y Clay nunca habían hablado en privado, para despejarse un poco fue al árbol, aunque esto no le ayudó.

Se encontraba de pie recargado en el tronco, mordiendo levemente su labio y moviendo su pie por las ansias, tenía mil preguntas en su cabeza, pero una voz le sacó de sus pensamientos.

—Hola George. — Sonrió Wilbur, aunque está sonrisa se desvaneció al ver como se exaltaba el menor. —No quería asustarte ¿Estas bien?

—Si, solo no te esperaba aquí, hola Wil.

—Oh, solo venia a visitarte. — Sonrió nuevamente Wilbur mientras veía a George sentarse debajo del árbol suavemente, casi como si se estubiera desvaneciendo. —¿Ocurre algo?

—No, solo hay muchas cosas que han ocurrido últimamente. — Habló mientras se le formaba una sonrisa en su rostro recordando todo, después pasó su vista al mayor. —Me solías visitar todos los fines de semana y esta vez te esperé y nunca llegaste.

Wilbur soltó una pequeña risa por la queja del menor, se sentó a su lado.

—Tuve que viajar, nuestro reino iniciará negocios con otros reinos y mi hermano quiere que esté con él, sabe que soy bueno en estas cosas.

—Si, lo eres. — Afirmó mientras asentía con la cabeza. —¿Con que rey negociaras?

—Primero, con el rey Sapnap, si lo tengo a él tengo al rey Quackity y al rey Karl.

—Muy astuto.

—Lo sé, aunque esos tres están teniendo problemas matrimoniales. — George lo miró sorprendido, Wilbur sólo se encogió de brazos con una sonrisa en el rostro. —Bueno, háblame de ti ¿El tema del matrimonio se arregló?

—Uhg. — Soltó una queja al sacar ese tema, no le enojaba, solo no sabía cómo explicar todo. —No lo sé, lo único que cambió es que espero que mi padre lo acepte y no acelere las cosas. — Sacó una risa nerviosa.

—¿Por qué lo dices?

—Ayer Clay y yo le dijimos a nuestros padres que tenemos una "relación". — Marcó las comillas con sus manos, Wilbur se sorprendió. — Ahora mismo están hablando los dos y no se absolutamente nada.

—Aw, George está enamorado. — Habló mientras abrazaba a George, este solo se sonrojó leve.

—Cállate.

—Creces muy rápido, recuerdo cuando jugábamos en todo el castillo y ahora te miraré caminando al altar. — Respondió mientras George soltaba una pequeña risa.

—¿Recuerdas como jugábamos en los pasillos a las guerras? — Le preguntó mientras se acomodaba en su abrazo, acostando su cabeza en el hombro del mayor.

—Si, recuerdo que hacías trampa porque nunca le hacías caso a mis explosiones.

—También recuerdo cuando escapamos, nunca se dieron cuenta de eso.

—Solo regresamos esa vez porque te lastimaste y solo fue un rasguño.

—Recuerdo que dolía mucho, cállate.

—Cuando recolectabamos flores solo porque querías tu cabello lleno de colores.

—Se veía hermoso mi cabello, alguna vez te puse unas a ti, también te veías bien.

—Fueron muchas cosas, George, no creo que hubiera pedido una mejor infancia. — El mayor soltó una risa. —Lo mejor es que siempre estuvimos juntos.

—Literalmente estuviste conmigo toda la vida.

—De hecho recuerdo cuando te vi por primera vez cuando eras un bebé.

—No me has dejado en paz ni un momento. — Bromeó George mientras soltaba una risa.

—Si te casas te tendré que dejar en algún momento.

—Es momento de cambiar de idiota a cual aguantar. — Ambos rieron. —Eres mayor que yo y ni siquiera tienes algún romance, así no me puedes dejar tu primero.

—Nunca dije que no tuviera algún "romance."

—¿Tienes uno?

—Es complicado. — George lo golpeó suavemente, Wilbur río. —Apenas lo conocí en el viaje de negocios, si es oficial, serás el primero en enterarte.

—¿"Lo"? Juraría que a ti te gustaban las-...

—Ya callate y prométeme que nunca me olvidaras ni aunque te cases.

—Lo prometo.

George río por su vago intento de cambiar de conversación, pero al final ambos siguieron hablando de sus anécdotas de cuando eran niños, ambos se amaban el uno al otro y no sabían que serían sin el otro.

La corona [DreamNotFound] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora