Capitulo 1

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Aún no ha amanecido. Las calles desiertas inundadas por la oscuridad, algún que otro borracho camina por ellas, o simplemente están tirados en el suelo esperando a que el mundo deje de dar vueltas.

Las sombras aún siguen en las calles.

Las 03:00 AM. El humo del cigarrillo está rondando por toda la habitación, la cama esta desecha, aunque no es nada anormal, varias prendas de ropa están esparcidas por el suelo.

Otra noche en la que el insomnio le gana la partida a Amara, está en el alfeizar de la ventana, fumando el último cigarro del paquete. La alarma suena 10 minutos más tarde de marcar las 03:00 AM. Amara apaga el cigarro en los viejos ladrillos de la pared, y tira la colilla por la ventana. Recoge los vaqueros del día anterior, coge una camisa limpia del armario, y algo de ropa interior limpia, después se dirige a la ducha.

Un espejo, un objeto que refleja las imágenes que se sitúan delante de este, todos los espejos del apartamento de Amara están tapados por viejas sabanas, la razón es simple, le tiene miedo a su propio reflejo, más bien le tiene miedo a lo que puede hacer la imagen que el espejo le devuelve. El problema llega cuando sale de su apartamento, pues ella no puede controlar nada fuera de las paredes que la enjaulan. Justamente en el ascensor de su edificio, hay un espejo. Todas las mañanas, o más bien noches, el mismo espejo le enseña la imagen de una chica pálida y debajo de sus ojos azul pálido, tiene unas ojeras tan profundas y oscuras, que parecen dibujadas con carboncilla en su cara, sin contar, que su pelo tan poco la ayuda, ya que es de un negro tan oscuro como una noche sin Luna, dándole un aspecto de muerta viviente.

El ascensor llega a su destino después de unos segundos, obligándola a dejar de mirarse en el espejo. El portal del edificio, es completamente blanco. Pared y suelo están pintados de ese color, dándole un aspecto de quirófano, y eso, añadiéndole el frío que hace en él. Los buzones están situados en la pared izquierda. Amara abre el suyo, está repleto de propaganda de restaurantes de comida rápida, y cartas del banco. Coge una de las cartas, en ella le comunican que tiene menos de una semana para pagar el alquiler, o será expulsada de su apartamento.

"Dijeron los mismo la semana pasada"- Piensa Amara.

04:49 AM. Esta amaneciendo, los primeros rayos de sol van iluminando las calles, compitiendo con la oscuridad de la noche. Las calles están vacías, a excepción de otras almas como Amara, que compiten con el cansancio y las ganas de volver a la cama. Amara camina por una de las calles más transitada de Barcelona, la calle Pelai, pero a esta hora, pocas personas pasean por ella.

05:00 AM. El metro llega tarde. Amara se apoya en una de las paredes, y busca en su bolsillo el paquete de tabaco, saca un cigarro y lo enciende con el mechero, está decorado con las siglas " I LOVE PARIS", un regalo que le dio su madre cuando fue a Paris.

El metro va con retraso. Amara expulsa el humo del cigarro, en el momento en el que el sonido del motor del metro empieza a acercarse a la parada. Tira el cigarro al suelo, y lo apaga pisándolo con la bota.

El metro se para segundos más tarde, y ella se adentra en él. 

El tren de las 05:00 AmDonde viven las historias. Descúbrelo ahora