25 - Guerra.

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Se podía ver la nieve espesa cubriendo los terrenos de Hogwarts como si fuesen montañas de azúcar sobre un pastel de navidad, hacía frío pero al mismo tiempo era algo cálido tal vez porque estaba tomada de la mano con Cedric mientras caminaban por los anchos terrenos hasta llegar al lago, imponente, grande y majestuoso se veía en estas épocas brillando con total claridad. El agua debía estar helada de hecho, los tentáculos del calamar gigante golpeaban con fuerza el agua por algún motivo y era una vista increíble.

— Parece animado el calamar gigante —, Karol se recostó en la nieve donde antes había césped, era fría pero estaban bien abrigados y por un buen tiempo estuvieron hablando de cosas sin sentido.

Varios minutos después estaban adivinando la forma de las nubes que lucen formas extrañas, una de ellas parecía un escreguto de cola explosiva de esos que en cuidado de criaturas mágicas el profesor Hagrid había obligado a cuidar, eran criaturas nada agradables pero a Karol le agradaba bastante el tener que cuidarlo a diferencia de muchos alumnos, menos les agradaba las clases después de descubrir por medio del profeta y por culpa de esa periodista que Harry, Ron y Hermione odiaban cuyo nombre se le olvidó, el hecho de ser semigigante a muchos alumnos no les agradó en absoluto. Pero a Karol le parecía bastante genial la materia impartida por Hagrid, además, últimamente eran mucho más interesante con la clase de los pony.

     — ¿No te parece que se parece un escreguto de cola explosiva? —, señaló a la pequeña nube —, bueno... Antes de crecer. Cuando crecen son realmente increíble, los leí en un libro... Y no son amables con la mayoría, aún así son lindos.

     Cedric soltó una risa.

     — ¿Qué quieres decir con geniales o lindos? Para tí incluso el Colacuerno Húngaro es bonito, cuando para la mayoría es aterrador —, dijo entonces.

     — Bueno... No son inofensivo se puede decir, pero igual son geniales —, dijo — ¿Crees que en una de las pruebas tengas que enfrentarlos? Son difíciles de lidiar con ellos, porque son muy fuertes.

  — La segunda prueba tiene que ver con algo diferente —, dijo con seguridad, Karol recordó lo del huevo a lo mejor había decifrado el enigma y sabía lo que vendría. Entonces antes de preguntarle Cedric se levantó de golpe como cuando te acuerdas de la comida puesta en la estufa que se está quemando, cosa que no era posible pero así parecía — lo olvidaba, tengo que decirle a Potter el me dijo lo de los dragones.

    — Así que resolviste el enigma... Creo que sí es lo correcto decirle —. Afirma detenidamente antes de analizar lo que decía de forma repentina —, debería estar en la torre de Gryffindor o por alguna parte — aseguró entonces sentándose de igualdad forma, acomodando su cabello que le había caído algunas ramitas e intentaba sacarlas.

     — Te ayudo —, dijo el chico mientras extendía sus largos dedos, sacando de ramita en ramita con suavidad como si fuera a quebrarse con cualquier cosa, el cabello rojo parecía anaranjada cuando llegaba los rayos del sol.

    Estaba cerca y desde allí podía fijarse en cada rasgo facial que tenía, sus ojos grises concentrados en su cabello que intentaba limpiar junto con ella eran más brillantes cuando lo miraba de cerca, podía ver su pecho moverse con su tranquila respiración y la sensación de los dedos en el cabello le daba tranquilidad.

     — Ya está —. Aseguró el masculino.

      — Gracias —, le sonrió agradecida mientras ambos se colocaban de piel sacudiendo su ropa, así pues acomodo su cabello largo para sujetarlo porque no solo caían ramas sino la humedad de la nieve.

    Ambos tenía la narices rojas por el frío que hacía, la cara fría pero por alguna razón sentía calor cuando estaba cerca de él porque era muy cálido.

      — Nieva bastante en Hogwarts, la nieve parece azúcar —, comento mientras inclinaba para tomar una bola de nieve.

     — Si, pero no te la comas —, dijo en respuesta.
 
Karol soltó una carcajada y Cedric se preguntaba porque pero repentinamente sintió una bola de nieve golpeando su cara, fue sorprendido a tal punto que mientras se quitaba la nieve de la cara escuchando en el ambiente la risa de Weasley, se retiró las manos de la cara que se limpiaba, la había perdido de vista y había muchos árboles y nieve de dónde pudo haberse escondido.

     Ella se tapó la boca escondida entre algunos arbusto, miró a Cedric desde su puesto sonreír.

     — ¡No es buena idea Karol! — gritó tomando una bola de nieve — tengo buena visión.

     Entonces otra bola de nieve golpeo su nuca al mismo tiempo que la pelirroja cambiaba del lugar escondido pero no fue suficiente aunque estaba lejos, la había logrado ver, vaya que tenía buena vista (y buena puntería) porque desde esa distancia le arrojó la bola de nieve que si no sé agacha le habria dado.

     — Buen movimiento —, dijo antes de coger más bolas de nieves, está tuvo que correr para esquivarlas casi todas porque la última le había dado en la pierna mientras se escondía en un árbol de sauce grande.

     La chica estiró su varita susurrando un hechizo que lo hizo caer sobre la nieve.

      — ¡Contraataque! — gritó tomando una gran cantidad de bolas de nieve para bombardearlo.

      — Eso es trampa —, dijo entre las risas de ambos — me rindo, me rindo —, sonrió tomando las manos de la chica, estaba en el suelo y ella a un lado de rodillas (porque lo estaba bombardeando de nieve) —, eres buena en guerras de bola de nieve.

      Se extendió en la nieve respirando hondo, ella terminó de sentarse a su lado ambos con una sonrisa, Karol después de unos minutos lo ayudaba a limpiar la nieve convertida en  agua helada sobre el rostro de Diggory.

    — Oh, mira — señaló a un par de Gryffindor que identifica en todos lados (más cuando uno era pelirrojo) — ahí está Harry, puedes hablar con el por lo de la segunda prueba.

A love for eternity (Cedric Diggory X Tu) [Pausada Por Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora