A love for eternity (Cedric Diggory X Tu) [Pausada Por Edición]

33 - Pérdida.

    Acomodando un poco su cabello se estaba preparando para ir a clase de transfiguración una materia bastante difícil pero que a ella se le daba bien, mientras se peinaba notó un pequeño amiguito en su cabello, un escarabajo extraño estaba rondando por ahí.

      — Oh, cuídate amiguito, casi te aplasto — dijo dejando al escarabajo en la primera mesa en ver — tengo algo de prisa, vuelve a casa amiguito.

      Dándole la espalda se fue a la sala común. No vislumbro a Cédric, pero no le importo del todo porque no tenían el mismo horario así qué sólo busco a sus amigas. Devony estaba sentada de brazos cruzados discutiendo con Angelique quién parecía furiosa.

      — No he cogido tu absurdo libro — Agregó Devony hecha una ira — no me interesa tampoco.

      — ¿Quien más va a ser? Cerein no leé ni las instrucciones del maquillaje qué tanto se hecha — la morena quien venía bajando frunció el entrecejo.

     — Conmigo no se metan, resuelvan sus asunto entre ustedes — comentó.

     — Y Karol ... Vamos, ni si quiera es opción, sabemos que no lo haría — agregó sin más Angelique.

     — Ah, pero de mi si dudas ¿Verdad? — atacó Devony molesta.

     — Vámonos de aquí — susurró a la muchacha guiandola a la salida bajando las escaleras — cuando discuten son una pesadilla, vamos a clases, no querrás llegar tarde — dijo apresurada.

     Después de unas largado horas de transformación Karol se sentía cansada, apenas veía por dónde caminaba lo que no la hizo ver qué tropezó bruscamente contra alguien al punto de casi caerse entre ambas personas. Estabilizandose un poco se encontró con aquellos ojos claros realmente perfectos, no parecía humana, y su plateada cabellera. Tenía una mirada de desprecio para con ella mirandole de arriba a abajo con tanto repudio qué sintió ganas de golpearla.

      — Disculpad —. Agregó con su acento france — no me había fijado — continuó hablando a lo que ella asintió.

     — No, disculpame a mí, venía distraída — agregó un poco incomoda.

     — Yo también lo Egtaguia, pengsando en Cédric —. Agregó en tono de molestia antes de continuar lo cual le hizo recordar que esa hermosa mujer estaba sumamente interesada en Cédric, pero él se había negado rotundamente a ello.

     No se había llevado bien con la chica, era odiosa, vanidosa y le caía del asco aunque algo le decía que tenía un lado amable. Sobretodo su desesperación al tener a su hermana en peligro, tenía un carácter, Karol admiraba el carácter. Pero le seguía cayendo mal.

     — Claro que sí ¿Cómo no dejar de pensar en él? — agregó con una sonrisa — es mi novio.

      Pudo verla de espalda respirando profundo deteniendo un poco su caminata, no obstante con su elegancias innata meneó si melena y caminó directo hacia su camino sin chistar un poco.

     Siguió su camino hasta las afueras del castillo estaba un pocos nublado y quería sentarse un rato en el húmedo pasto, cerca del bosque negro, bajo algún árbol sombreado acercándose al primer árbol frondoso qué vislumbro, no tenía más clases, pronto anocheceria así que se quedaría solo un rato.

     Eso pensaba hasta que sin darse cuenta se quedó dormido por un largo tiempo hasta que alguien la despertó. Apenas sintió algunos empujones y su nombre ser llamado abrió lento sus ojos, encontrándose con los ojos grises de Cédric quién dedicando una sonrisa de alivio soltó un respiro.

     — Te estuvieron buscando desde hace un tiempo ¿Qué hacés aquí? Son lo sé nueve de la noche y nadie te encontraba, suerte que no te encontró algún profesor — le dijo viendo como le costaba adaptarse por el sueño.

     Verla frotarse los ojos era tan tierno qué le provocaba tomarle una foto para conservarla por Siempre, para desgracia del él, no siempre cargaba una cámara encima.

      — Tienes un escarabajo en el cabello — dijo quitando el animal empujandolo lejos del lugar.

      — Rayos, estoy en problemas — comentó con una sonrisa — un prefecto me ha encontrado a amplias horas de la noche.

     Acomodándose un poco para levantarse intentó colgarse de piel pero fue en vano hasta que Cédric la ayudo a levantarse.

     — Si, estás sn problemas, te bajaré cinco puntos por preocuparme — dijo extendiendo su mano que ella cogió sin pensarlo. Era tan calida su mano.

     Caminaron un largo tiempo sobre el pasto para volver el castillo mientras hablaban de cosas tribales.

      — Sí, básicamente, aparecerse es algo difícil al principio pero después lo lograrás — continuo hablando Cédric — durante la prueba un compañero de clases dejó un dedo en otro lado, fue un problema recuperarlo luego.

      — Vaya, es bastante difícil entonces — respondió la chica.

     — Para nada — continuo Cédric — solo debes seguir muy bien las instrucciones.

     Al llegar a su casa y decir el canto y seña continuaron hasta encontrarse con una sala casi vacía.

     — La encontraste—. Dijo Angelique aliviada siendo seguida por otras dos chicas.

     — Se había quedado dormida bajo un árbol — dijo abrazando por los hombros a la mad baja quien bajo la cabeza por el comentario.

      — Es fue peligroso — regaño Cerein — las tres estuvimos a punto de hacer un escándalo, casi le decimos a tu primo.

     — ¿A cual? — preguntó Karol.

    —A  todos en realidad — respondo Devony la pregunta — pero es un alivio que estés bien, podemos dormir con calma — Dijo subiendo las escaleras hacia las escaleras.

     Las otras dos chicas negaron pero subieron tras ella.

     — Descansa un poco más linda — le dijo recogiendo uno de sus lechones rojos antes de darle un pequeño besó en los labios — Buenas noches — le dijo dándole otro beso en la frente antes de guardar distancia.

     — Si — dijo pérdida — buenas noches tu también.

     Con sus mejillas rojas subió las escaleras y abres de abrir la habitación volteó la mirada, Cédric se despidió con la mano, aún seguía ahí aguardado que entrará a su habitación con es deslumbrante sonrisa. Ella se respondió con la mano aún ruborizada y con una sonrisa boba entró a su habitación.

     Sentía que todo esto era tan un sueño del cual no quería despertar nunca.