You are my beautiful weakness.

1 año.

Después de todo el alboroto hecho por mi culpa, mi hermano Zeke decidió sacarme del colegio.
Papá aún no estaba enterado de eso, por qué el seguía encerrado en el cuarto blanco, así que no tenía forma de enterarse, auq e cuando el saliera del cuerpo estaba segura de que lo primero que haría era estallar con mis hermanos, ya que ellos lo encerraron. Yelena como buena nuera le llevaba comida, agua y ropa para que se cambiara.

Mamá no estaba muy convencida pero Zeke hablo con ella, así que me mandaron a vivir con los abuelos.

Ellos vivían  en una hacienda ubicada a la orilla de Puebla, estaba feliz ya que Puebla era muy bonito aparte estaría con mis abuelos.

Al llegar me informaron que tendría maestros particulares, osea estudiaría en casa, me llevaron con un psicólogo para descartar cualquier problema que tuviera. Y así fui diagnosticada con Trastorno por estrés postraumático, Trastorno de ansiedad y Trastorno depresivo mayor, termine medicada y con más atención por parte de los abuelos.

Pero aún así con todas esas pastillas dentro de mi cuerpo, aún sentía la necesidad de estar con alguien, pero con ¿quién de las dos?

(...)

Un año después...

Yo ya no sentía el pasar de los días, solo supe que Eren y mis demás compañeras de habitación entre otras personas acababan de graduarse, cosa que yo también había hecho, pero de manera diferente. A decir verdad quería correr a encontrar a Hange, a Nana, Petra, Pieck, Eren y demás amigos, para felicitarlos. Pero no quería arruinar esa celebración.

—Abuela —Grite animado al entrar al salón.

Ella levantó la vista de su libro y me miró. —¿Que pasa cariño? —me señaló un asiento a us lado, indicándome que me sentará.

—abra una fiesta en mi anterior academia, para festejar a los recién graduados, ¿Crees que pueda ir?.

—¡Claro cariño, eres parte de la familia anfitriona!.

—¿Enserio?, ¿Puedo ir?. —me levanté de golpe y ella sonrió ante mi reacción.

—Claro cariño, de hecho te lo iba a decir hoy en la cena, por qué tu papá hablo, dijo que te quería con ellos, para celebrar algo importante, tu vuelo es mañana a las 4 a.m.

—¡Iré a empacar! —sali corriendo a mi cuarto para hacer maletas

Empaque todo lo que pude y me senté en mi cama a esperar.

(...)

Salimos súper temprano de la hacienda, el abuelo iba de mal humor por qué según el la abuela lo había despertado con agua fría, interrumpido así su sueño.

Al llegar al aeropuerto, espere lo necesario y después de 40 minutos pude abordar el avión, iba muy emocionada pero a la vez nerviosa.

Me quedé gran parte del trayecto dormida, por qué no quería llegar desvelada a la celebración.

Cuando aterrizamos una azafata me despertó, con los ojos algo cerrados asentí y espere a que acabará de reaccionar bien para poder salir.

El clima de mi ciudad siempre era agradable, pero está vez estaba nublado, lo bueno es que llevaba un abrigo.

Las personas que fueron a encontrarme fueron Zeke, Yelena y Eren. Abracé a Eren y a Zeke, mi meta fue solo saludar de lejos a Yelena y se cumplió, ni ella ni yo nos acercamos.

Fuimos a la academia para prepararnos para el supuesto baile, me llevaron a la academia de hombres para alistarme ahí en el cuarto de Eren.

Ví mi vestido y me sorprendió que está vez fuera blanco, manga larga y me llegaba dos dedos arriba de la rodilla, los zapatos eran rojos de tacón bajo, un collar de perlas, aretes dorados y tenía la peineta de mi madre Dina.