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Me levante como cualquier otro dia para ir a la escuela, iba en mi patineta por poco y me ponen retardo, pude ver a los mejores amigos que "se quieren y no son novios", baje de mi patineta y me la guarde en mi escondite, donde guardo también comida, cigarros entre otras cosas.
Despues de eso entre a mi salón lo primero que vi fue a mi hermana sentada con la presidenta, ya que son muy buenas amigas.
Me senté en mi lugar, no suelo ser muy sociable aunque si tengo bastantes amigos. Ya habían estaban casi todos en eso entra la profesora Park.
—Buenos días chicos —dijo como siempre con una sonrisa.
—Buenos días profesora Park —digimos todos al unison.
—Bien entreguen sus teléfonos —dijo y en eso cada uno se paro y entregó su teléfono. —¿alguien sabe algo de Hyeon-su?
—La última vez que la vi fue en el salón de química —dijo un chico que estaba sentado al frente.
—Bueno... Empecemos con la clase —dijo y empezó a escribir algo en el pizarrón.
Había pasado un rato hasta que la maestra habló.
—¿Que entienden por prejuicios? —preguntó y nadie dijo nada. —si Hee-on que crees que es.
—Ammm bueno...en realidad quiero ir al baño —dijo la chica y yo solo agache la cabeza.
—Ve, a ver presidenta que tal si nos dices que crees tu —dijo la profesora mirando a la presidenta.
—Todos somos prejuicios ¿no? —dijo haciendo un pausa y volvió a hablar —así que todos tenemos prejuicios.
—Bien... ¿Que piensa... Señorita Rebelde? —dijo preguntándome y yo solo me pare, algo avergonzada.
—¿Ah? —fue lo único que pude decir.
—¿Porque te llaman Señorita rebelde? —preguntó y cuando iba a responder, alguien habló primero.
—Porque hace lo que quiere —dijo Dae-su y yo solo lo mire mal.
—Si... Y no importa si esta prohibido o no —dijo esta vez Woo-jin y también lo mire mal.
—Bien... ¿Estas de acuerdo con Nam-ra? —me pregunto.
—Amm... Si —dije algo dudosa.
—¿En qué parte? —volvió a preguntar, pero no pude responder porque llegó una chica toda ensangrentada.
Todos se acercaron a la chica, solo pude oír que nombró al profesor de ciencias, mi hermana quería ir pero solo negué con la cabeza y ella entendió.
Somos algo parecidas pero no lo suficiente para que nos confundan, solo escuchaba a todos hablando y diciendo cosas del profesor Lee, para ser sincera el me ayudo cuando estaba a punto de perder su materia. Tenía que hablar con él antes de que sucediera algo. Así que salí con cuidado para poder buscar al señor Lee.
