El demonio del Edén

Pipo

-Dios, te dije que no debimos desvelarnos jugando Jenga- Roberto Almeida iba conduciendo algo rápido, así que no vio el tablón con clavos que pasó a traer y por supuesto le poncho una llanta.

-!diablos!- de casualidad miro a un lado, había un anuncio de mecánico, el más cercano parecía ser . Así que llamo para que una grúa le auxiliara.

-Este tipo de accidentes son muy comunes - dijo el mecánico que lo atendió una vez que llegaron al taller.

-Parece ser - no queria conversar, reconocía al tipo del lugar, sabía perfectamente que era hermano de Azirafel y para nada queria dirigirle la palabra.

-Ya no vamos a llegar al hospital, papá - dijo el pequeño angustiado, sostenía una jaula donde llevaba a su pequeña mascota que encontró 3 días antes .

-¿Estás enfermo, pequeño?- pregunto Ismael, el niño por supuesto negó -¿Entonces? Oh, es el pequeño que llevas ahí - nuevamente el niño negó .

-Voy a ver a mi mamá , está enferma y creo que está mejor ya- Roberto con una seña le indico que guardara silencio, a esto Ismael no pregunto más, pues en efecto eran ellos a los que esperaba .

Un cambio de llantas por supuesto que no tardaba mucho, pero tenía que retenerlos el mayor tiempo posible en lo que Azirafel hacía contacto con el niño, aunque era una misión casi imposible porque Roberto parecia no despegarle la vista ni un momento.

En un momento dado, tuvo que ver algo que el mecánico le pedía confirmar. Un cambio de balatas o algo para que su hermano se tomará su tiempo.

-Hola- esperaba que desde el punto donde estaba no lo viera, fue Anthony quien se acercó al niño- ¿Tu gato no tiene hambre ?- lo había sacado de la jaula para tenerlo en sus brazos .

-No sé, le di de comer antes de salir de casa . Se pone a llorar si no come - sin duda , le afectaría enormemente cuando Azirafel terminará con la vida de un niño tan pequeño, parecía no pasar de los 6 años- pero aquí no hay nada que pueda comer -

-Yo tengo leche, si me dices su nombre te traigo un poco -

-Se llama Pipo- Anthony asintió y fue por un cartón pequeño y una tapa de algo, parecía limpia. Almeida se apresuró a ir a dónde estaba su hijo cuando lo vio bajarse de la banca , suspiro de alívio cuándo vio que era un muchacho quien hablaba con él.

-¿Que haces , Félix?- el niño con los ojos señaló a su gato bebiendo, como si fuera un obvio "dándole de comer ¿No ves ?" -tu , muchacho¿Trabajas aquí?-

-Ayudo en la oficina - dijo intentando ser cortante , si se ponía nervioso podría salir mal todo .

-Ya- el mecánico le hablo al señor Almeida, este sólo le advirtió al joven que si no veía a su hijo ahi todavía, sabría lo que era temerle a dios en Tierra. Anthony no le dio importancia y continuo hablando con el niño.

Podría ser un poco fácil para algunos sacarle información a un niño, este era uno de esos casos, al proveerle alimento a Pipo, Félix se sintió con la confianza de contarle cosas a Anthony como si fueran amigos, incluso prometió no decirle nada a su papá a cambio de una galleta , se la trajo directo de la máquina dispensadora y se despidió antes de que la abriera.

-Me agrado mucho David- dijo una vez que subieron al auto.

-¿Así se llama?- Félix asintió

-Pipo y yo hicimos un amigo¿Podemos venir a verlo después?- Almeida negó , si el chico trabajaba ahí lo menos que queria era estar cerca de el hermano de aquel asqueroso .

Félix no pronunció otra palabra en todo el camino hasta que llegaron al hospital, el estacionamiento al aire libre ,tenía algún vagabundo cerca, pero siempre que se comenzaban a portar groseros el guardia del estacionamiento los echaba, había uno peculiar que estaba sentado en el suelo y recargado en la entrada del hospital.