Transmigré como un Personaje Secundario en la Novela que Odio [Regresa]

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Capítulo 2: Blancanieves

Luego de que apareciera un portal, del cual salieron un par de Dokkaebis ejecutivos que venían a por Paul, Dokja los persuadió para que le dejasen darle una (muy merecida) paliza antes de llevárselo consigo. Mientras se llevaban al golpeado Dokkaebi hacia el portal, Dokja intentó preguntarles a los ejecutivos sobre el siguiente sub-escenario, pero ellos sólo respondieron que "era un problema que los altos mandos estaban solucionando".

Dokja se dirigió hacia sus compañeros después de sacudirse la ropa y comenzó a explicar —Omitiendo varias partes importantes— la situación actual.

—¿Otro desastre? —El regresor habló con voz muerta y con un ligero tono de molestia.

A excepción de Heewon (quien ya de por si estaba agotada), todos los miembros del grupo se encontraban heridos, algunos más que otros, que apareciera un sub-escenario de forma tan repentina realmente era... No tenía sentido quejarse.

—Lo más probable es que se convierta en uno, aunque, más que un desastre, es como un cataclismo... —respondió el lector mientras miraba al suelo de forma inexplicable.

—Entonces —El regresor se detuvo por un momento para luego continuar—, ¿Tienes un plan?

Yoo Jonghyuk lo miró fijamente. Dokja se sobresaltó, pero rápidamente recuperó la compostura, y dijo con total seguridad:

—Podemos vencerlo.

Por supuesto, eso era una mentira. No había un plan, para nada, esta vez, realmente no sabía nada.

—Eso no fue lo que pregunté.

El regresor lo miró con fastidio y él simplemente se encogió de hombros.

—Nuestro equipo está en mal estado, y Jung Heewon, quien está en mejores condiciones, ya está lo suficientemente desgastada.

Luego de referirse a Heewon como alguna clase de objeto/arma o similar, se escuchó un pequeño chirrido provenir de los labios del regresor.

'Nuestro'

Vaya, aunque fue solo una simple palabra, por una fracción de segundo, Dokja se emocionó al escucharla salir, no de otro, sino de la boca del propio regresor. En contraste, la jueza atravesaba con la mirada al hombre de bata negra de forma bastante peligrosa.

Dokja sonrió.

—Todavía está el grupo del Rey de los errantes, y aún sigo con vida.

—Aún —recalcó Heewon con los brazos cruzados y una mirada aún más amenazante que la que le dedicaba a Yoo Jonghyuk un momento atrás.

Jihye lo miró como si estuviera loco y le gritó que estaba siendo imprudente, Hyunsung, Sangah, Gilyoung y Yoosung lo miraron con preocupación e insistieron en que se mantuviera quieto por ahora, y Yoo Jonghyuk, bueno, él simplemente se limitó a fruncir el ceño sin decir una palabra, como siempre lo hacía.

Siendo sinceros, Dokja sabía que la posibilidad de que todo se viniera abajo era del 99.9%, pero quedaba una minúscula probabilidad de 00.1% de que las cosas resultaran a su favor. Por el bien de sus compañeros, tenía que confiar en ella.

Al final, Dokja trató de tranquilizar —inútilmente— a todos, y esbozó una pequeña sonrisa con un rastro de incertidumbre a los miembros de su equipo.

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