Capítulo 30: ¿Qué hay bajo la manga?

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oooohhhh, tantas clases, tanto que hacer. Oh, cómo fue tan agotador. Shen Yuan se aseguró de mantener la sonrisa constante, pero maldita sea, se estaba volviendo agotador. Una de las cosas que hacía que estas noches en vela fueran un poco más fáciles era el halo de protagonista de Luo Binghe y su sol. Seguro que su misma sonrisa aclaró sus poros y ayudó a que las flores crecieran, pero Shen Yuan estaba cansado. Se sentía como un anciano, como su papá. Suspiro... pero supuso que eso no era lo único que lo mantenía en marcha.

Pero muy a menudo, siempre había esas tardes en las que saludaba al último de esos discípulos, por lo general, serían Binghe o tal vez incluso Ning Yingying. Pero finalmente llegaba a casa, se quitaba los zapatos, cerraba la puerta y se hundía en la cama, listo para roncar durante horas. Lo haría, por supuesto, pero se despertaría con una pequeña sorpresa especial que cariñosamente se colaría en su manga, despertándolo alrededor de la medianoche más o menos. Su pequeño misterio se deslizaría para calentarse y su lengua parpadearía contra su muñeca, haciendo que Shen Yuan se despertara.

Shen Shixiong se agitaría y abriría los ojos para descubrir que su manga estaría ocupada. Se asomaba, sonreía y gritaba con voz suave: "¡Xizhi-Lang~!"

La serpiente abriría un ojo y murmuraría somnolienta: "Maestro Shen..."

Shen Yuan se rió entre dientes, “¿Quién es el Maestro Shen? Olvidaste llamarme A-Yuan”.

La serpiente tarareó: “Disculpa, esta se disculpa”.

"Siempre te disculpas", se rió Shen Yuan. "Deberías decir algo más además de disculpas".

"Algo más…?" la serpiente pensó y luego dijo: “Hmm. ¿Supongo que este se comió tres ratones hoy?

"Oh, ¿lo hizo?" Shen Yuan arrulló cariñosamente.

"Sí, eran muy sustanciales en esta forma".

"¿Y qué más hizo Zhuzhi-Lang hoy?"

"Bueno... estaba más fresco que la mayoría y no pude encontrar un lugar cálido afuera", murmuró. "Entonces, si a A-Yuan no le importa, creo que su manga es muy cómoda".

"Oh, ¿cuándo me ha importado?" este discípulo principal se preguntó. Se quedaron allí, en el calor de esa habitación, casi durmiéndose, pero no del todo. A la deriva en la línea de la conciencia y el sueño.

Zhuzhi-Lang luego murmuró: "Desafortunadamente, no pude volver a hacer un cuerpo mejor".

La mirada de Shen Yuan bajó y dijo: "Eso es desafortunado".

"Está."

"Lo harás mejor la próxima vez", aseguró.

“Una vez que el Maestro tenga una forma adecuada, yo también tendré una”, afirmó. "Entonces, cuando veas un yo más grande, no será tan aterrador".

"Tu apariencia habitual no es tan mala".

"¿No es bastante aterrador?"

"No cuando sé que eres tú", se rió Shen Yuan. "Eres tan suave que nunca podría tener miedo".

La serpiente miró al joven y preguntó: "¿Le gustan mis dos formas, Maestro Shen?"

"Por supuesto", sonrió. “Claro que me sorprendí al principio, pero conocer a Xizhi-Lang; cualquier forma está bien.”

“¿Incluso el feo?”

"No eres feo, Xizhi-Lang", Shen Yuan le dio un pequeño beso en la cabeza. "Sólo diferente. Te ves... muy singular.

"El Maestro Shen está siendo demasiado amable".

"Ese soy yo, el tipo shixiong", se rió. "Al menos lo intento."

Limpiando tus lágrimasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora