Limpiando tus lágrimas

Capítulo 42: Tus manos suaves son todo lo que podría desear

¿Nombró dejarlo caer lo suficientemente bien? Él pensó que sí. Y mirando los ojos muy abiertos e interesados ​​de Binghe, debe haber hecho un buen trabajo.

Shen Yuan sonrió y dijo: “Es uno de los demonios de los sueños más poderosos que existen. Dicen que perdió su cuerpo anterior y ha estado saltando de un cuerpo a otro desde entonces, poseyendo a los menos afortunados que se cruzan en su camino. Es muy formidable, así que tengamos cuidado”.

"¡Mmm!" Binghe asintió con la cabeza. Comenzaron a vagar a través de la niebla y Binghe preguntó con asombro: “¿Cómo sabe Shixiong sobre Meng Mo? No creo haber visto nunca su nombre en la biblioteca de nuestro pico.

¡Decir ah! ¿Pensaste que podrías engañarlo? ¡Disparates!

Él respondió suavemente: "Hay mucho conocimiento en la biblioteca que aún no has tocado, pero he aprendido sobre este individuo peligroso en mi hazaña de un año". Je, realmente puede decir que se enteró de algo en ese viaje. Nadie podía refutarlo después de todo.

Binghe aceptó esa información y comentó: "Shixiong debe haber aprendido mucho".

"Mhm".

"¿Él también conoce un antídoto para No Cure?"

Shen Yuan se detuvo en su paso, Binghe lo siguió. El shidi lo miró con curiosidad y Shen Yuan se volvió hacia el niño con una mirada solemne, teniendo que mentir, "Lo siento... Binghe. Desafortunadamente, no sé cómo curar No Cure”.

El rostro de Binghe se abatió, por lo que el shixiong trató de tranquilizarlo: “Está bien, sin embargo. Me estás ayudando con el Ojo del Sur. Eso debería darme suficiente qi hasta que aparezca la ayuda”.

“Pero los demonios…”

Shen Yuan tuvo que seguir aguantando, por el bien de ambos, “Shizun vendrá tras nosotros. Y el líder de la secta dijo que volvería más tarde esta noche. Probablemente ya haya regresado con todos los otros señores del pico. De ninguna manera alguien dejaría caer a Cang Qiong. Y una vez que las cosas se hayan calmado, seguramente nos encontrarán”.

El chico estaba solemne pero asintió. Caminaron un poco más y murmuró: "Shixiong... Quiero decir dos cosas".

"¿Hm?" el discípulo principal se asomó por encima de él.

"Yo..." Binghe se detuvo, cruzó las manos e hizo una reverencia, "Creo que las gracias están en orden".

“B…Binghe…”

“Gracias por salvarme la vida”, dijo Binghe. “Si no fuera por ti, podría haber estado afectado por No Cure. Siento que eso es lo apropiado para decir… pero…” Apretó los dientes, apretó los puños y luego se enderezó. Su rostro estaba rojo y enojado, y ladró: "¿Por qué lo hiciste?"

"¡¿Binghe?!" Shen Yuan se sorprendió. Nunca había visto a Binghe enojado, y mucho menos con él.

"¡¿Por qué hiciste eso?!" Binghe gritó. “¡No tenías que protegerme! ¡Deberías haberme dejado recibir el golpe!

"N-nunca lo haría", respondió el shixiong. "¿Cómo pude dejar que eso te sucediera?"

"¡Pero deberías haberlo hecho!" replicó Binghe. “¡Deberías haber dejado que No Cure me envenenara! ¡No deberías haber sido tú!”

"Binghe, no debería haber sido ninguno de nosotros", Shen Yuan trató de disipar esta ira acalorada. Sabía que no debería haberse interpuesto en el camino, pero no pensó que lo regañarían por eso.

"¡Pero aún!" el rostro del muchacho estaba contraído por el arrepentimiento y la rabia. "¡Si tenía que ser cualquiera de nosotros, debería haber sido yo!"