Encadenada al Pasado© (Serie Encadenados: LIBRO II)

Capítulo 3

HELENA

— ¿Acaso tú me cuentas cada cosa que haces? No y no tengo ningún problema con ello.

— Entonces no te preocupas tanto por mi como yo lo hago por ti, porque de solo pensar que alguien te puede mirar mal, a mi eso me afecta.

— Puedo defenderme sola, Drake. - Greta sigue con su espalda derecha y los hombros erguidos.

— No se trata de defenderte. Sino de no exponerte, de no exponernos a todos. Piensa por un segundo. Si te hubiera pasado algo ¿Qué hacemos nosotros? ¿Qué hago yo si te lastiman?

La forma en que pronuncia la última pregunta me destruye. Y aunque quiero regañar a mi hermana por guardarse esto, no ganamos nada perdiendo tiempo discutiendo. Abrí la boca para interrumpirlos, pero papá lo hizo primero. Se acercó mediando entre ellos.

— Pueden dejar esto para después. No sé qué dicen esos mensajes, pero Greta enserio necesito que asegures tu seguridad. Somos una familia por algo, él es tu esposo por algo. No debe haber secretos entre ustedes.

Octavio Frazer dice esa frase hipócrita ante todos nosotros y no se si soy a la única que le molesta y no quiere dejarlo pasar. Pero otra vez cuando quiero hablar soy interrumpida, esta vez por la llegada de Aria quien con su computadora estilo militar debajo del brazo.

— ¿Me perdí el resto de la discusión?

Me hace reír y olvido totalmente nuestra estúpida discusión de ayer. Ella pasa de mi posicionándose en la punta de la mesa familiar no sin antes guiñarme un ojo.

Ella y yo no podemos estar separadas. Aunque no hayan sido más que 24 horas.

La vemos teclear por unos minutos con el teléfono de mi hermana junto a ella.

— Si que eres tonta, podrías haberme hablado de esto cuando estabas en casa. -murmura sin dejar de teclear códigos que no llego a comprender por la rapidez con que lo hace. - no puedo rastrearlo por alguna razón, pero puedo hacer que se detenga. Un bloqueo de cualquier número que quiera hablarte sin que tengas registrado el número.

— Quiero más seguridad.

Aria piensa un segundo, deteniendo el movimiento incesante sobre el pequeño teclado.

Asiente con una sonrisa entusiasta como quien descubre un nuevo juguete. Con la liga que lleva en la muñeca, se recoge el cabello y vuelve a la acción.

Papá se acerca a Drake para calmarlo, bebo un sorbo de mi trago cuando Greta toma asiento junto a mi mejor amiga

— ¿Hay algo en tu telefono de lo que tenga que preocuparme? -murmura por lo bajo - ningun video teniendo sexo ni nada ¿no?

Toso riéndome y Greta me dedica una mirada severa.

— No me mires a mí, ella fue quien pregunto.

— Lo que sea que encuentres de esa índole, ignóralo.

— Crearé un sistema operativo especial para nosotros. Solo yo seré capaz de intervenirlos en el caso de que sea necesario. Empezare con el de Greta, pero lo instalare en el de ustedes también. — dice refiriéndose a Drake y yo- más que nada por precaución.

Ambos asentimos.

— En el mío no encontraras nada turbio- me adelanto a declarar conteniendo la risa.

La cena termina siendo recalentada y la noche familiar termina hablándose de trabajo.

Mi enojo con mis hermanas por embaucarme esta disfrazado por la preocupación que siento porque algo le pase a cualquiera que se encuentre en esta casa.