Fanfic obkk; Toda la vida del detective Hatake ha girado en torno a un único caso, la muerte de sus padres. No descansará hasta finalmente descubrir que fue lo que sucedió realmente ese día.
AU moderna.
[Reescritura publicada]
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Advertencia: ataque de pánico, leve presencia de anhedonia
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Konoha. País del Fuego Semana dos, sábado
El departamento de Obito era considerablemente más grande que el de Kakashi, estaba ubicado en el sector más acomodado de la ciudad, en el décimo quinto piso del edificio. Kakashi estaba parado en el balcón, apreciado la hermosa vista, las luces de la ciudad destacan en la oscuridad de la noche.
—Es lo último que me queda —dijo Obito mientras le mostraba a Kakashi un cigarrillo de marihuana. El Hatake se volteó a verlo, pero no pronunció ninguna palabra—. ¿Estas bien...?
—De maravilla —dijo con una sonrisa—, el lunes vuelvo a trabajar... —hizo una pausa—. «Tuve un ataque de pánico después de casi dos años» —pensó, mientras apretaba las mangas de la camisa que llevaba—. Y hay un hombre siguiéndome... De maravilla. —Se apoyó en la barandilla del balcón y miró hacia abajo—. Sí algún día desaparezco sin dejar rastro... ya sabes lo que me sucedió.
—No digas eso. Dudo que te rapten. —Ubicó el cigarrillo de marihuana en sus labios y lo encendió—. Eres bueno cuando se trata de peleas físicas. ¿Recuerdas cuando le rompiste la nariz a Kai?
—Me tiraron tinta azul en el pelo, ¿qué más querías que hiciera? Recuerdo que dijeron que me "faltaba color" —habló con disgusto.
—A ellos los expulsaron luego de eso, ¿no? —preguntó mientras le entregaba el cigarrillo al detective.
—Y a nosotros nos suspendieron por una semana entera. —Sé alejó de la baranda, tomó el cigarro y le dio una calada.
—Oh, ¿y recuerdas cómo se puso Kushina-san cuando se enteró que te perforaste los labios? La mejor parte fue cuando se enteró que fue Minato-san quien te dio permiso. —Soltó una risa.
—Lo recuerdo —dijo con una sonrisa—, Naruto tenía dos años, decía que quería ser como yo, dijo que también se quería perforar los labios... Tuve que quitarme los piercings cuando entré a la academia. —Le pasó el cigarrillo a Obito—. Estos —dijo apuntando sus labios—, se cerraron hace bastante, los de las orejas aún están abiertos.
—Mierda, ¿cuántos años tiene Naruto ahora?
—Doce —dijo mirando a Obito—. Me siento viejo cada vez que lo veo o habló con él.
—¿En serio pasaron tantos años? Lo conocí cuando tenía un año... Prácticamente era un feto. Mierda, en tres meses cumplo veintisiete.
—Aún es diciembre, no te preocupes —trató de animarlo. Obito le pasó el cigarrillo y Kakashi le dio una calada—. Aún queda todo diciembre para que acabe el año.
—¡Cuatro semanas no es nada! —exclamó—. ¿Pasarás navidad y año nuevo en Senkai?
—No, por lo general estoy solo en casa... Las cosas con Minato-san... son un tanto difíciles en este momento. ¿Qué hay de ti?
