Capítulo 4

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Bajo del coche de Hunter mientras me despido de él y camino hacia la entrada del hospital.

Ayer después de poner unas canciones más me quedé dormida, y al despertar Hunter ya se estaba arreglando para ir al bufete, yo le dije que quería venir a ver a mi padre un rato y se ofreció a traerme. Íbamos a pasar a desayunar algo, pero Hunter ya iba bastante tarde y no quería que lo regañaran. 

Que el bufete sea de su tío no le da nada de privilegios y Hunter lo sabe perfectamente.

Cuando llego al pasillo de la habitación correspondiente veo a mi padre saliendo de la habitación en una silla de ruedas y a mi madre llevándolo.

–¿Qué pasa? –pregunto

–Nada, solo que al parecer tu padre ya puede ir a casa–menciona mamá

–Oh eso es bastante bueno–respondo entusiasmada

–Así es hija–exclama mi padre justo cuando mi madre lo empieza a conducir por el pasillo hacia la recepción

–¿Ya no te mandaron nada pa? –camino a la par con mi madre

–No, soy libre de esas drogas a las que llaman medicina

Mi madre ríe y le da un pequeño golpe en el hombro, mi padre solo se limita a mirarla mientras ríe. 

Siempre que estoy con ellos puedo percibir demasiado el amor que se tienen y aunque a veces sean empalagosos, no puedo evitar desear tener algo así con Hunter, porque sí, es él con el que quiero vivir esos momentos o primeras veces para siempre. Sacudo mi cabeza para salir de mis pensamientos un poco apresurados la verdad, se acercan las fiestas decembrinas y con eso cumpliremos otro mes en la relación.

–Si le mandaron unas para el dolor hija–continúa mi madre

–Bueno papá sabes que...

–...tienes que seguir la receta al pie de la letra–termina mi padre por mí a la vez que rueda los ojos–lo sé hija, y de todos modos tu madre estará cuidándome.

–Bien, solo pasaba a saludar, y como veo todo ya está bien. Entonces volveré a la escuela

–¿Tienes clases cielo?

–No ma pero necesito ir por unos libros de la biblioteca para ponerme a estudiar desde ya, estoy nerviosa porque son las últimas evaluaciones–me sacudo un poco alterada. Estas evaluaciones son importantes, las calificaciones me ayudarán a subir mi promedio, y no es que vaya mal, de echo voy bien, pero subir no está de más. A parte como Hunter siempre me dice que soy la típica nerd, JA! Como si él no lo fuera, por algo termino antes de lo previsto, si sigue así, pronto podrá unirse oficialmente al bufete con tan solo 23 años.

–Claro hija, con cuidado por favor y verás que te irá de maravilla

Me despido de ellos con un abrazo y un beso en la mejilla, tomo el camión que me llevará a la facultad. En el camino se subió alguien que me parecía bastante conocida, intenté disimular, pero no funciono ya que al momento en el que me miró se terminó sentando a mi lado con una sonrisa de oreja a oreja.

–Hola–me saludó animadamente

–Hmmmm hola

–Me llamo Samantha, ¿me recuerdas?

–Oh si claro, Sam... ¿cómo estás? –asentí distraída y le sonreí. 

Definitivamente no lograba recordarla de nada, digo, aumentando que tengo memoria de Dory me iba a ser imposible hacerlo

Para el chico que siempre amé [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora