Flores de mentiras

La flor más bella

7:30 de la mañana y como todos los días llevo más de veinte minutos esperando un bus para llegar a mi clase en la universidad. No soy la única, este es el pan de cada día para los que no tenemos carro, cuando por fin llega, subir y tomar un espacio, si es que encuentras porque la mayoría de veces ya está lleno, es el pan de cada día, prácticamente lo hago por inercia.

Lo curioso es que en el bus puedes ver, gente que va a trabajar, hombres elegantes y mujeres maquillándose, chicos escuchando música, otros hablando con sus amigos, acostumbrados a vivir de prisa y dejando pasar las cosas que parecen insignificantes pero que en realidad te ayuda a entender cómo funciona el mundo. Todos corren por algo y ese "algo" puede demorar toda la vida.

Mi clase de hoy es historia de la psicología, llegar tarde, interrumpir, y sonreírle a la manada de compañeros que tengo. Me considero popular pero no del tipo popular creído o que se cree mejor que los demás, no, si no del tipo que le sonríe y habla a todos. Creo que puedo aprender algo de los demás, y ellos pueden aprender de mí.

- ¿Ya hiciste el trabajo de teoría de la personalidad? - me pregunta Marta

-Claro, llame ayer a Sheldon y él me explico todo- le respondo de burla

-¿Sheldon? ¿El que propuso la teoría que nos mandaron investigar?

-Sí, es muy amigo mío, ¿no sabías? - respondí en tono jocoso

-No tienes arreglo, Claudia- dijo riendo

-Era un chiste boba, no lo he hecho, tuve que trabajar todo el fin de semana, lo hago hoy después de clases

-¿Lo hacemos juntas?

-Listo, sé que no puedes vivir sin mi cariño -respondí guiñándole el ojo

-¿Señorita Ramírez es tan amable de contarnos que es holismo? -nos dice el profesor interrumpiéndonos

-Claro - respondo tratando de acordarme lo que investigue, ¡bingo! -.El holismo es una doctrina, que afirma que el todo es más que la suma de sus partes...

El todo es más que la sumas de sus partes... Nunca un concepto me había definido tanto, podían conocer cada una de mis partes pero nadie sabía lo que sufría, nadie conocía mi todo, solo la parte que yo decidía mostrarles, la de la chica alegre y relajada.

(...)

Pasó mi día de clases y estaba de vuelta en casa, mi padre estaba leyendo el periódico, solo alzo a la vista cuando entré a casa y no me dijo nada, como siempre.

-Buenas tardes-insistí yo

-Buenas-me respondió con molestia

- ¿Donde esta mamá?

-En el súper-dijo con tono de amargura

No le dije nada más, solo subí a mi habitación a liberarme de mi brasier y el ruido de la ciudad.

Pasados lo que creo fueron diez minutos suena mi celular, era un mensaje de Marta.

"Algunos encuentran el silencio insoportable porque tienen demasiado ruido dentro de ellos mismos" Robert Fripp

Marta y sus frases, cada día me manda una, según ella como terapia, a mí no me molesta y dejo que lo haga, es una de las personas más cercanas a mí pero como siempre no me entiende del todo sin embargo sigue allí, por eso le tengo mucho cariño, ella es de esos corazones puros que andan muy escasos últimamente

Le respondí con una carita feliz.

- :) gracias guapa, pasa buena noche

- :3 de nada, hasta mañana-me respondió como acostumbraba a hacerlo