Apocalipsis Zombie: La historia de Wolf. Primera Parte.

Capitulo 22: Situado en el engaño Parte 1

Tenía que hacer algo, así que caminé a la casa de John para ver qué tanto estaba haciendo. Toque la puerta 3 veces. Él sabia que era yo, era yo el único que tocaba así y mas cuando necesitaba algo.

-Un momento. -dijo la voz de John mientras las luces de la casa se encendían-

-Vamos que es invierno y tengo mucho frío -Dije poniéndome la chaqueta-

- Calma, calma -John abrió la puerta, estaba sin camisa- Ed... ¿sabes qué hora es?

-¡Estamos a 5 grados hijo de puta! -Dije- ¿Por qué estas sin camisa?

-¿5 grados? Eso explica tanto calor... -dijo- Ya qué... entra.

-Se nota a leguas que eres alemán. No vengo a entrar, vengo a que me acompañes. Vístete y ve por tu arma. Nos vemos en casa de The Kid.

- Vale... -dijo y cerró la puerta de la entrada-

Me fui caminando a la casa de Drake, traté de ir lo mas rápido posible porque el frío estaba horrible. Al llegar con Drake toqué la puerta.

-¡Eduardo! ¿Cuánto tiempo? -Dijo sonriendo-

-Mira, no hay tiempo. Ven. Te necesito y no preguntes por qué... sólo te necesito.

No pasó mucho hasta que llegó John

-¿Y bien? ¿qué es tan urgente como para interrumpir mi descanso? -dijo John con un tono sarcástico-

Debía pensar en una estrategia.

-John ¿Aun tienes esos prototipos que vi? Necesito ese que según tú, puede destruir un auto completo.

-¿Qué haremos, Wolf? -Dijo Drake-

-Iremos por Romero -Dije-

- ¿La micro-mina magnética? Tengo unas cuantas pero no puedo utilizarlas, recuerda que soy 19% metal.

-Vaya... -Dije- La usaré yo.

- Vale... pero úsalas cuando no esté cerca de ti -Dijo John buscando algo en su mochila-

-Tenemos que ir a buscarlo -Dije-

-Pues dicen que está en la fábrica abandonada de refrescos a las afueras -Dijo Kid-

-Ja.. Buen lugar para un escondite... -Dijo John sarcásticamente-

-Es que van a recoger quien sabe qué de ahí... -Dijo Kid-

-Entonces, si están esperando un cargamento la seguridad ha de ser estricta. Romero no me conoce ni yo a él, así que puedo ser un infiltrado. -Dijo John-

-En realidad nos están esperando... -Dijo Kid- Quiere que vayamos, me lo dijo ayer.

-¡Maldición! -dijo John golpeando la mesa- debe ser una trampa, Romero sabe que te llevas bien con Ed ¿No es así?

-No, sólo me dijo... Es lo raro... Deberíamos ir.

-Si se da cuenta de la presencia de Ed, sabrá que algo ocurre -dijo John pensativo-

-Deberíamos ir -Dije- Tal vez sea otra cosa.

-Aun así debes tener cuidado. -Dijo John, mirándome-

-Vamos... De una vez... -Dijo Kid algo impacientado-

Salimos de la casa y en no mucho tiempo llegamos donde Romero. Tenía preparada mi arma por si algo salía mal. Era una fábrica de dos puertas que formaban una grande, algo destruida por así decirlo, teníamos que ir al patio de atrás pero la única entrada abierta era por esa puerta.