Capítulo 9: The Kid

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Habíamos subido al helicóptero, si The kid sabía algo debíamos saber que sabía porque así sabríamos que.... Ah que trabalenguas, bueno no importa, Albert me miro y asintió, sabía algo que yo no sabía que quería decir pero algo si sabía, quiero encontrar a The kid para sacarme de dudas, de todo lo que me paso antes ¿Por qué tengo recuerdos vagos del entrenamiento? No recuerdo muy bien mi entrenamiento, no si sí tan si quiera lo hice, algo me está pasando, conforme nos acercábamos mi cabeza daba vueltas a asuntos pendientes, después de horas pude ver la ciudad de Londres, el Big Ben, el reino unido era muy lindo, pero se veían los autos incendiados, las casas sacando fuego algunas y como dijeron en 28 Days Later, no hay nadie que pueda apagarla, Londres era una ciudad hecha fuego, debíamos tener cuidado.

-Señor lo lamento pero no poder acercarme, tendrán que arrojarse en paracaídas, hay unos por ahí, los recogeré dentro de 24 horas, iré a la base de Manchester por combustible y cosas que necesitaremos, estaremos en contacto con la radio -Dijo el piloto mirándome-

-Sí, no te preocupes cabo Juan -Dije- ¿Listo Albert?

-Listo Eduardo, cuando quieras -Dijo pasándome mi paracaídas y poniéndose el suyo-

-¡Vamos allá!

Dije arrojándome desde el helicóptero, el viento soplaba con gran intensidad por la velocidad que llevábamos, el aire casi no me dejaba ver y eso que tenía lentes.

-Deben caer ahí

Dijo el piloto que había arrojado una señal de humo a un edificio, los científicos de la F.R.A.Z. descubrieron que los zombies eran ciegos, solo se guiaban por el oído y tacto, eran los únicos sentidos que estaban vivos en su interior, abrí mi paracaídas, Albert también y maniobramos para llegar al techo del edificio, nos quitamos los paracaídas.

-Mira Eduardo, así es como termina una ciudad cuando idiotas atacan, la paranoia puede llegar a destruir ciudades enteras, es la peor amenaza del ser humano, incluso peor que los zombies -Dijo mirándome-

Me acerque lentamente al borde del edificio y me recargue en la parte superior de él, ahí puse mis manos, puse mi cabeza encima de ellas y mire la ciudad.

-Mi ciudad está peor, completamente en ruinas por la bomba que se arrojó en ella, esto se convierte cada vez más en el infierno Albert -Dije- ¿Cuál será la siguiente ciudad de primer mundo en caer?

-No lo sé, pero espero que no sea Paris y Barcelona -Dijo-

-Barcelona ya cayo, lo siento, cuando tu no estabas la bombardearon -Dije-

-Mi ciudad natal... ¿Por qué? -Dijo mirándome con tristeza-

-La infección arraso la ciudad -Dije- Todo era zombie, no había más que hacer, la F.R.A.Z. busco supervivientes pero no había nadie, ni siquiera un perro, todo era zombie, el bombardeo era inminente, todo está en ruinas, lo siento hermano.

-No te preocupes, sabía que esto tenía que pasar algún día, ninguna ciudad estará a salvo de esta infección ¿Recuerdas The Walking Dead? -Dijo mirándome melancólico-

-Como no -Dije-

-Pues, sabes en este momento... Diré la frase de Hershel o más bien algo así casi no la recuerdo ¨Sabia que dios levantaría a los muertos y caminarían entre nosotros... No me imagine que tenía en mente esto¨ -Dijo-

-Pues yo tampoco hermano ¿Pero que nos queda? Solo pelear y esperar a nuestra muerte, yo solo quiero... -Me interrumpió-

-Mantener a tu familia viva y feliz -Me miro- ¿Cierto?

-Cierto, Michelle y los niños -Me volvió a interrumpir-

-Son lo único que te queda y sin ellos estarías muerto -Me dijo-

Apocalipsis Zombie: La historia de Wolf. Primera Parte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora