『Saga: Mirror』
Libro 𝟐
Un cumplidor de deseos, solo pídeselo y él te lo hará realidad, inclusive mejor a lo que habrías llegado a pensar, incluso cuando ese deseo sea tu propia muerte, él la haría la más bella de todas.
...
- ¿Quieres ir a comer? - invitó el chico de cabello rubio - Supe que tú cumpleaños es pasado mañana.
Ella acomodó su mochila a su costado sonriendo. Finalmente las clases habían acabado, pensó que recibiría alguna llamada de atención por haberse escapado lo que quedaba de la clase de química, sin embargo, no pasó nada de ello. Por lo que aún cuando las clases faltantes fueran aburridas, pudo estar sin tanto estrés.
Había salido del aula saludando a varios chicos que se encontró en el pasillo, cuando entonces uno de sus compañeros salió corriendo para alcanzarla y caminar a su lado. Cosa que no le disgustaba, aquel chico de cabello rubio le agradaba bastante.
- Seguro, ¿Quiénes más irán?
Terminó por preguntar aún cuando ya pudiera imaginar la respuesta, por una parte quería solo ser ellos dos, es decir, Hyunjin era alguien muy popular no solo en la clase por su apariencia, también era alguien bastante amable por lo que no era de extrañar su popularidad, mucho menos el que muchas chicas estuvieran tras de él, Byul-Yi no era la excepción, aún así nunca había intentando acercarse de otro manera que no fuera solo como compañeros a él.
- Mis amigos, supongo que también ellos han invitado gente - comentó sonriente sus ojos se ocultaron en medias lunas.
Ella suspiró un tanto aliviada, aún cuando deseara ser ellos dos, no quería estar sola con él, imaginó que podría llegar a ser incómodo por lo que agradecía que fuera más gente.
- Genial.
- Nos esperan a la salida.
Asintió gustosa, caminando por lo que queda del pasillo hablando acerca de las clases, avanzando de manera lenta entre aquel mar de alumnos, todos avanzando lento hablando entre ellos de trivialidades, hasta que llegaron a la salida, en dónde ella pudo distinguir al grupo de amigos del rubio chico acompañado de otras tres chicas que eran de otros salones, sin embargo, se sorprendió al notar detrás de estos a Heeseung, sintió inmediatamente los nervios invadirle.
Después de irse luego de haberlo besado tras las canchas, pensó que volvería a perderse por días como hace, pero no era así, estaba ahí esperando por ella, lo que le hacía esto muy extraño. Fingió no verlo continuando con si caminar junto a Hyunjin sin detener la conversación de lo visto en la clase de literatura.
- Solo los estábamos esperando a ustedes - comentó uno de regordetas mejillas en cuanto se acercaron.
Ella en ningún momento dirigió su mirada a Heeseung esperando que el tampoco pudiera encontrarla.
- Byul - se escuchó de una masculina voz añadirse.
Ella cerró sus ojos con fuerza para luego sentir la mano de Heeseung posarse en su hombro. El resto de los chicos los observaban esperando a que se presentará. Heeseung era notoriamente más alto, sonreía ampliamente luciendo agradable, notó como una de las chicas que estaban ahí no paraba de mirar de arriba a abajo a su amigo mientras sonreía cortamente algo coqueta.
No la culpaba, era conciente que Heeseung era atractivo, aún así, este último parecía no saberlo o si lo hacía, no tomaba ventaja de esto, o eso ella creía, así que no le tomó importancia.
- ¿Es tu novio? - preguntó el rubio sorprendido mientras lo señalaba.
- Sí - dijo él.
- No - respondió ella a la vez.
El resto los miraba bastante confundidos, ambos se voltearon a ver esperando que alguno terminara por ceder, notó una brillo de diversión en los ojos de Heeseung, siendo está su confirmación de que no pensaba ceder, así que suspiró rendida. Volviendo a mirar a ellos.
- Somos amigos cercanos - explicó - Lo invité a comer hace días, lo había olvidado. Lo siento Hyunjin, quizás otra ocasión.
- Está bien, puede acompañarnos - comentó uno - Aparte, Hyunjin dice que será tu cumpleaños, sería más cómodo para ti estar con amigos como él.
Ella asintió un tanto rendida. Y después todos se pusieron en marcha caminando de dos en dos, Hyunjin iba con otro chico delante suyo con él que se iban dando de empujones cada tanto mientras reían escandalosamente. Mientras que ella venía hasta atrás con Heeseung en completo silencio.
- ¿Te gusta? - preguntó acabando con el silencio en el que venían sumergidos desde hacía varios minutos.
Ella tardó en procesar la pregunta, hasta que lo vio hacer una ademán con la cabeza señalando al chico rubio que seguía riendo fuertemente.
- Tal vez - respondió.
Heeseung soltó una corta risa dándole un leve empujón con su hombro, parecía que hoy venía muy juguetón, lo cuál no le molestaba.
- ¿Desde cuándo te gusta? ¿Por qué me besaste si él te gusta?
No era ningún reclamo, lo conocía bien como para saber que no se lo tomaba a mal. Parecía divertirle la situación, y sabiendo como era, seguro usaría esto para burlarse cada que pudiera, ella bajo la mirada maldiciendo entre dientes, volviendo a escuchar la burlesca risa del joven a su lado.
- Algunos ¿Diez meses? - confesó - Fue desde la primavera pasada.
- Vaya, hace como ocho meses nosotros tuvimos...
- Cállate - interrumpió - Tal vez también tú me gustas, pero supongo que es diferente.
Heeseung volvió a reír, la tomó por los hombros pegándola a su cuerpo para luego revolver su cabello a lo que ella se quejó intentando tomar sus manos para impedirlo. Hyunjin volteó a verlos de reojo al menos un breve momento, para volver su atención con los chicos que iba.
- Está confesión hará que me pongo celoso. ¿Debería marcar territorio?
Byul rió siendo ahora ella que le empujó de manera juguetona a lo que ambos rieron.
- Idiota, ni que pudiera ser tu propiedad.
Él se mantuvo callado, por un instante la sonrisa en su rostro quiso borrarse, logrando mantenerla sin el mismo brillo que antes; busco su mano para entrelazarlas, Byul-Yi lo conocía desde hacía años, ignorando por completo el hecho que era tan poco lo que verdaderamente sabía de él, pasando por alto el peso real de sus palabras, después de todo, solo sabía de él lo que Heeseung quería que supiese. No volvieron a tocar el tema, continuando con solo comentar trivialidades lo que restaba del camino.
Hyunjin había vuelto a voltear de manera discreta notando la unión en sus manos lo que lo entristeció un poco, aún así el tampoco dijo nada, hasta que llegaron al local de pollo frito, para sentarse en una mesa grande.
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Vamos a intentar ser activos por aquí, así que regresé algo rápido ^^
