¡Minho, eres un idiota! || Adaptación - MinSung -

ENFERMEDAD

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Jisung se despertó adolorido, no pudo moverse y sintió que las fuerzas se le iban, cayó en la cama y se acurruco suavemente entres las sábanas.

Estaba solo, sin Minho o siquiera una nota.

Quiso no llorar, realmente quiso intentar no llorar, pero cuando se giró y lo único que sintió fue el aroma de Minho, no pudo evitarlo.

Había soñado con esto, con estar con Minho de esta forma, pero se suponía que al despertar él debía estar ahí, debía llevarle el desayuno a la cama y jurarle amor eterno, no marcharse, no tratarlo como si hubiera sido solo el polvo de esa noche.

Que tonto había sido al creerse que anoche no se iría.

Que tonto...

— ¿Aló? —

— ¿Jisung? — la voz de Changbin sonó tan rota del otro lado de la línea— ¿Estás bien?

Jisung quiso preguntar, pero conocía a Changbin, no diría nada en ese momento, quizás deba llamar a Wooyoung más tarde y pedirle que deje de ser un estúpido insensible.

— Perfectamente—

— Escucho tus sollozos, Jisung— murmuró el otro chico con tristeza— ¿Es por Minho?

— No — sollozó con fuerza— ¿Por qué sería por él?

— ¿Tuvieron relaciones? — la voz de Changbin se tensó del otro lado— ¿Te lastimó? ¿Te volvió a golpear? Han Jisung, exijo que me digas que pasó anoche

— N-no está— Lloró con fuerza— Se fue

Seo Changbin empezó a reírse como loco desde el otro lado de la línea, claro que no estaba, él lo tenía justo al lado a medio cambiarse y con el rostro sudoroso.

— Tsk— miro a Minho jadeante— Así que es eso...

— No te rías, para mí es importante— sollozo el castaño— Fue mi primera vez

— Sé que fue tu primera vez — jadeo Changbin al sentir que Minho lo tocaba— Soy tu mejor amigo se todo de ti

— Pero...—

— Hasta tu tipo de sangre y todo lo que te gusta hacer—

Jisung asintió conforme sabiendo que Changbin no podría verlo, tenía el mejor amigo del mundo, le confiaba todo, hasta su esposo y sus hijos.

En el futuro, estaba seguro de que Changbin supliría muy bien su lugar, cuidaría de sus bebés y de su esposo.

Colgó el teléfono después de escuchar muchos consejos de Changbin sobre cómo aplicarse cremas para el dolor y sobre que pastillas debía tomar para que no le doliese tanto.

¿Acaso no entendía que le habían dado tan duro y bien que no podía ni sentarse?

¿Cómo alcanzaría si quiera una pastilla en ese estado?

Bufó

¿Así tendrían que hacer a sus cinco hijos?

— ¡Minho, eres un idiota! —chillo de mal humor— ¡Te amo, idiota!

Del otro lado de la ciudad un jadeante Minho intentaba someter al distraído de Changbin, no sabían cómo habían terminado así, el castaño gimiendo bajo él mientras que el mayor rogaba para que dejara de moverse.

— N-no— sollozo el castaño cubriéndose— Déjame Minho

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Jisung pasó un rato más, tenía el vago deseo de que el mayor llegara con un ramo o algo para él, bien, no importa el ramo, si él regresa, él estaría muy feliz y lo recibiría con los brazos abiertos.

Solo tenía que regresar.

Se hizo de noche y el siguió desnudo en la cama esperando, no podía moverse de todos modos, se acurrucó y se aferró a la almohada llorando, bien, no era del todo malo... Minho lo amaba ¿Verdad?

A la mañana siguiente había perdido las esperanzas, abrió sus ojos con pesadez y se vio rodeado de flores rosas, demasiadas flores, se sentó en la cama y buscó una explicación.

— Mi bebé ha despertado— Minho entró con una bandeja de comida en manos— Mi lindo bebé

Se sonrojo como un tomate y aceptó gustoso la comida.

¿Qué era todo eso?

— Tienes que vestirte— murmuró Minho con cariño mientras lo cargaba para llevarlo a la ducha— Tenemos que ir al doctor

— ¿Al doctor? —

Jisung no entendía nada.

— Sí, al doctor— repitió contento— Me niego a perder a mi lindo bebé

— ¿Minho? —

— No te vas a ir de mi lado—

Sí, ayer había tenido un ataque de pánico y había ido en busca de Changbin, al principio el castaño lo envió a la mierda, muchas veces, pero después de un largo rato y peleas, aceptó a ayudarle, se habían pasado todo un día discutiendo como evitar que Jisung muriera, de las causas probables, las que más llamaron la atención, fueron las enfermedades.

Jisung siempre había sido débil, una vez estuvo internado una semana por una simple tos.

Definitivamente era alguna rara enfermedad.

Changbin había golpeado tan fuerte a Minho por dejar a Jisung, que estaba seguro de que tendría buenos moretones por todo su cuerpo un buen tiempo y claro, él había tenido que controlarle porque el chico era un desastre, lloraba, reía y volvía a llorar, llamaba a Jisung, a Wooyoung y a un buen número de tipos.

Y para colmo de males, cuando pensó que al fin podría volver con Jisung y mimarlo, el castaño loco empezó a llorar preguntando por qué siempre todos le dejan.

¿Por qué Jisung tenía amigos tan raros?

— No quiero ir al doctor—

— No te he preguntado, Jisung, te vestiré e iremos a ese estúpido doctor para que te hagan todos los análisis—

— ¿Y mis bebés? —

— Con Yeonjun— respondió vistiendo a Jisung rápidamente— ¿Algo que quieras decirme?

— ¿Cómo qué? —

— ¿Algún cáncer oculto o alguna rara enfermedad que te lleve de mi lado?

— Bueno...— Jisung miró el suelo— Me enamoré de un idiota, eso puedo considerarse causa de muerte

Minho sonrió y negó, no, él no sería la causa de muerte del amor de su vida, lo cuidaría mucho, cada día, todos los días, no dejaría que se marchara de su lado.  

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