Capítulo 2: Amigos por así decirlo

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Narra Álex

Por lo que he ido hablando con Marta, se ve que está muy unida a su padre, también junto a mi hermano nos ha contado un poco de su pasado, me ha impactado todo lo que ha sufrido en la adolescencia y al inicio de la edad adulta.

Marc no decía nada, alguna que otra pregunta suelta, pero poco más, pero quería ayudar a Marta como fuese, ella tiene que tener amigos, aunque diga que no hace falta, que sola está bien, que así va a su rollo.

Álex: Venga ya, cómo no vas a necesitar amigos, estar siempre solo sin hablar con nadie es para volverse loco, al menos, yo lo veo así.

Marta: Al principio sí, después te acostumbras, nadie te da por saco, nadie utiliza tus debilidades para atacarte, te ahorras disgustos, puñaladas traperas, llantos innecesarios, vamos que yo estoy mucho mejor así.

Jaume: Marta, me voy con Julià al Mercadona, que necesito comprar algunas cosas para hacer la cena, te quedas con el perro.

Marta: Genial, le diría a estos de enseñarles la casa, pero va a ser que no.

Álex: ¿Por?

Marta: A ver hijo de mi vida, que acabamos de llegar y lo tenemos aún manga por hombro y limpiarla, como comprenderás aún no está visible.

Álex: ¡¡STITCH, SHIRA!! ¡¡A CASA!!

Después del grito de Álex a los perros, se metieron dentro de casa asustados, lo que no se dio cuenta Álex es que habían salido para jugar con Blay, el bodeguero de Marta, la cual, ella se reía porque ambos Dachshunds estaban con la cabeza fuera mirando a Álex fijamente.

Julià: Jaume, ¿Te importa si tu hija se queda con mis hijos? Así ella no está sola y así se van conociendo más, además los perros han hecho buenas migas, ya pueden salir a pasear los tres.

Jaume: Que haga lo que quiera, ella que elija.

Marta: ¿Qué tengo que elegir?

Jaume: Quedarte en casa o con los pilotos, ahí ya no digo nada.

Marta: En casa, así no molesto a esta gente.

Marc/Álex: Te quedas con nosotros.

XX: Conmigo también te quedas, Marta.

Marc/Álex: ¡¡Natalia!!

Marta: Perdona, ¿nos conocemos de algo?

Natalia: Claro que sí, tened cuidado con ella, que entiende más de motos que todos nosotros juntos.

Marta: Ahora no caigo quién eres.

Natalia: Natalia Ferreiro, la que te escribía en Instagram o reaccionando a una de tus historias que colgabas con aplausos o con corazones, no sé, haz memoria.

Marta: ¡¡Ostras!! Pues creo que seremos los tres vecinos por una temporada, yo vivo justo aquí y lo tengo todo por ordenar aún.

Natalia: ¿Y eso?

Marta: En temas laborales, me han trasladado aquí, pero no sé si para siempre o algo temporal, la pregunta del millón ¿Al final a que casa vamos? Porque nos hemos quedado aquí los cuatro.

Marc: A mi casa todos.

Al final Marta acepta ir a casa de los hermanos Márquez, Álex le enseña la casa a Marta, mientras Natalia y Marc juegan a la consola, Álex va a la cocina y se sirve un vaso de agua, le pregunta a Marta si ella quiere, pero le dice que no que está bien así, de pronto Álex se sienta en una silla y rompe a llorar en silencio, Marta le abraza, le consuela diciendo que todo va bien, mientras en el salón se oyen los gritos de Natalia y de Marc jugando al FIFA.

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