Miró hacia atrás esperando encontrar a la niña que solía ser, esa niña tan tranquila, tan dulce, tan genuina, siempre maquillada y bien arreglada, caminando por la vida con dos bronches en forma de flor cada uno de diferente color, soltando de su boca todo tipo de canciones, dejando a su alrededor algún que otro paso de baile, una pequeña llena de luz, una pequeña feliz.A lo lejos la niña la vio, corrió hacia ella y en cuestión de segundos un abrazo las encontró, la niña se separó un momento para mirarla, acarició su rostro quitando una lágrima que lo recorría, la miró directo a sus ojos húmedos y con una sonrisa le dijo que mantuviera la calma, que el miedo era parte de la vida.
Ella ya no era esa niña, ya no, pero en ese momento se dio cuenta que la pequeña vivía en su interior, supo que podía enfrentar el miedo, que con el recuerdo de esa niña siempre iba a poder volver a ser feliz.
🌻SG🌻